Desde la Segunda Guerra Mundial el planeta no había experimentado tiempos más llenos de incertidumbre que éstos. Una pandemia global, en una sociedad postmodernista es sinónimo de caos y con un mundo paralizado lleno de temor, desesperación, ansiedad, depresión, elevadas tasas de divorcios, suicidios, delincuencia, desempleo y pobreza; la Iglesia como ente vivo, con su luz radiante que alumbra en medio de la oscuridad se hace sentir con gran fuerza y Paraguay no es la excepción.
LA UNIÓN HACE LA FUERZA
Organizaciones como JUCUM, Mayma, la Asociación Vuelve a Soñar, YWAM Asunción entre otras, se unen para ser parte del cumplimiento de la Gran Comisión. Conozcamos un poco sobre ellas:
Mayma es una organización filantrópica paraguaya pro ONG, que siempre está dispuesta a colaborar para hacer el bien y ya ha iniciado su primera Escuela de Discipulado y Entrenamiento (EDE) inaugurando su propia base que ya se prepara para enviar a las misiones a su primera promoción de alumnos.
YWAM Asunción, también cuenta con una Escuela de Discipulado y Entrenamiento (EDE) que a través de un programa intensivo de 6 meses, equipa a jóvenes de todo el mundo para que conozcan y den a conocer a Dios.
Por otra parte, La Asociación Vuelve A Soñar, es una Asociación Evangelística en Paraguay que cuenta con alianzas en Chile, Argentina, Ecuador, Venezuela y Colombia. Liderada por el Evta. Juan Cruz Cellammare y un gran equipo altamente capacitado que durante la pandemia no ha cesado de trabajar arduamente en sus diversos proyectos de prevención y concientización en temas como las drogas, bullying, cuttying, abuso sexual, entre otros, en lugares como cárceles, comisarías, iglesias, comunidades y diversas organizaciones; enseñando y demostrando que Jesús siempre es la alternativa correcta.
AGENTES DE CAMBIO
A más de un año de haber iniciado la pandemia con responsabilidad y todas las medidas necesarias, arribaron a Paraguay un grupo de misioneros de diferentes lugares de los Estados Unidos y Canadá con edades entre 18 y 35 años, han llegado para servir con amor y pasión, junto a misioneros paraguayos y de otras nacionalidades sin importar lugar, día u hora
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