Chuck Colson y Nancy Pearcey lo afirman de esta manera: «La verdadera guerra es una lucha cósmica entre las cosmovisiones, entre la cosmovisión cristiana y las diversas cosmovisiones seculares y espirituales que se encuentran en su contra. » Efesios 6:12 debe venir a la mente: «Pues no luchamos[a] contra enemigos de carne y hueso, sino contra gobernadores malignos y autoridades del mundo invisible, contra fuerzas poderosas de este mundo tenebroso y contra espíritus malignos de los lugares celestiales. (NTV)” Es imperativo que comprendamos lo que el apóstol Pablo estaba diciendo si debemos ser eficaces en evangelizar, disciplinar y cambiar el mundo para reflejar la sabiduría de su Creador.
Fundamentalmente, lo más importante es tener una comprensión firme de la cosmovisión cristiana. Sin un marco bíblico para entender la política, no influiremos en la sociedad, y terminaremos interpretando la política como lo hace el mundo. ¿Qué es una cosmovisión? Estamos hablando de la lente a través de la cual vemos el mundo que nos rodea.
Usted y yo como cristianos elegimos tener una cosmovisión bíblica, lo que significa que vemos la vida a través de la lente de la Palabra de Dios. Creemos que la Biblia está inspirada en Dios, inerrante e infalible.
Pero, lamentablemente, pocos creyentes pueden poner en sus manos lo que creen como su cosmovisión, porque realmente no sabemos lo que la Biblia enseña.
No todas las personas con las que vives hoy tienen la misma cosmovisión que tú. De hecho, ¡la mayoría de los que viven a tu alrededor tienen una cosmovisión opuesta! También hay quienes tienen una cosmovisión confusa, porque intentan mezclar una cosmovisión bíblica con una cosmovisión humanista y luego se preguntan por qué todo parece estar tan mezclado en este mundo.
Por ejemplo, al asumir el debate en torno al matrimonio homosexual, los cristianos debemos tener nuestra opinión formada por la visión bíblica de lo que es el matrimonio. Si el matrimonio es una institución creada por el gobierno y puede ser cambiada por el gobierno, entonces no tenemos mucho argumento para oponernos al matrimonio homosexual.
Sin embargo, debido a que la Biblia tiene límites muy claros para lo que es el matrimonio, por qué fue creado, y para qué sirve, nuestras convicciones políticas con respecto al tema también deben reflejar estas verdades. La cosmovisión cristiana nos da los ganchos sobre los que necesitamos colgar estos temas, examinar y llegar a conclusiones que sean para el florecimiento de toda la humanidad.
Dejá tu comentario