Este jueves pasado, una comitiva fiscal anticorrupción realizó varios allanamientos simultáneos en las oficinas del Instituto de Previsión Social (IPS) en el marco de las irregularidades que fueron detectadas y reportadas en un informe de la Contraloría General de República (CGR), las cuales se habrían suscitado durante la administración de Vicente Bataglia, en el periodo de gobierno de Mario Abdo Benítez.
Los procedimientos estuvieron encabezados por un equipo de fiscales conformados por Jorge Arce, Diego Arzamendia, Néstor Coronel, Rodrigo Estigarribia y Luis Piñánez, quienes se llegaron hasta los edificios de la Caja Central y Boquerón donde recopilaron todos documentos que guarden relación con el caso.
De acuerdo a los detalles proveídos por las autoridades, la investigación es por lesión de confianza y otros, tras las denuncias de senadores y también del director de la previsional, Dr. Jorge Brítez en el marco de los informes emitidos por la Contraloría General de la República que evidenció un manejo administrativo irregular.
En la fecha, los agentes fiscales desplegaron averiguaciones sobre los documentos que detallan los datos sobre las obras que habrían sido pagadas no fueron ejecutadas en su totalidad o, en algunos casos, ni siquiera se habrían iniciado. Estas obras, que estaban destinadas a mejorar la infraestructura y servicios del IPS, se convirtieron en un enigma financiero. Los fiscales buscarán descubrir si hubo malversación de fondos o negligencia en la administración de los recursos destinados a estos proyectos.
Otro aspecto bajo escrutinio es el pago a proveedores. Se ha señalado que existen dudas sobre ciertos pagos realizados a empresas proveedoras de bienes y servicios al IPS. La investigación se centrará en revisar los contratos y facturas relacionadas con estos proveedores, con el objetivo de identificar posibles irregularidades financieras. Otra de las cuestiones que se investiga es el supuesto derroche de combustible en la previsional. Además de licitaciones que figuran en estado desconocido.
Los agentes fiscales han enumerado una serie de documentos que son fundamentales para la investigación y han anunciado que recorrerán las oficinas de los departamentos de Contabilidad, Infraestructura y Recursos Humanos del IPS para recopilar pruebas que arrojen luz sobre las alegadas irregularidades.
De acuerdo a lo detallado por los agentes fiscales, desde la previsional no enviaron los documentos originales, los archivos que fueron solicitados abarcan diversos ítems. Además, un reciente informe de la Contraloría revela que el IPS aún no ha proporcionado la documentación correspondiente a ciertas obras que fueron tramitadas pero no llevadas a cabo. Entre estas, se destaca una de un valor de G. 1.500 millones y otra de G. 1.900 millones.
Tras los allanamientos realizados, el titular del IPS agradecio al Fiscal General del Estado, Emiliano Rolón por la rápida respuesta a la solicitud de investigación. “Gracias al Dr. Emiliano Rolon, Fiscal General del Estado, por responder rápidamente a nuestra solicitud de conformación de equipo para investigar las irregularidades en el IPS. Estamos dispuestos a colaborar en todo lo necesario para llevar a cabo esta investigación”, expresó el doctor Brítez a través de sus redes sociales.
En agosto pasado, la Contraloría General de la República (CGR) exigió al IPS la documentación respaldatoria de pagos por más de G. 1 billón. Se reveló la falta de estos documentos, lo cual fue especialmente preocupante para los auditores. Además, se constató la ausencia de miles de muebles y el deterioro de bienes no utilizados para sus propósitos originales.
La evaluación financiera del IPS también presentó diversas irregularidades, detalladas en uno de los 10 tomos del Informe y Dictamen presentado ante el Congreso Nacional, que comprende más de 4.000 evaluaciones financieras.
En la auditoría de Fiscalización Especial Inmediata (FEI) sobre la millonaria deuda del IPS con proveedores, el contralor Camilo Benítez señaló una discrepancia significativa entre lo registrado en el balance del IPS y lo que las empresas farmacéuticas afirman que se les adeuda.
Dejá tu comentario