En la inauguración, el ministro de Salud, Carlos Morínigo indicó que este es un gran logro, ya que con este laboratorio se está instalando capacidades, se disminuyen brechas y se da satisfacción a una muy sentida necesidad en el ámbito de la salud pública.
Expresó que el valor de esta obra no se puede medir por el costo monetario sino más bien por su reelevancia intrínseca singular, pues un laboratorio de estas características genera una capacidad de respuestas ante múltiples eventos que pueden afectar a la población en general.
Por otra parte, el representante de la OPS/OMS en Paraguay, Dr. Luis Roberto Escoto, dijo que este avance marcará un rumbo en el desarrollo de capacidades nacionales, tanto de diagnóstico, como en formación de recursos humanos y en investigación.
“Es un hito que marcará un antes y un después en la lucha contra la tuberculosis y otras enfermedades ya que, a través del personal capacitado y la tecnología de este laboratorio, se dispondrá de un diagnóstico de mayor precisión y en menor tiempo, condiciones para el estándar de oro en el diagnóstico y tratamiento”, indicó Escoto.
Inversión:
La infraestructura y equipamiento requirieron la inversión de US$ 1.300.000, financiada en un 60% (US$ 768.000) por el Fondo Mundial para la Lucha contra el Sida, la Tuberculosis y la Malaria y en un 40% (US$ 532.000) de contrapartida nacional.
Otros datos:
Se trata del segundo laboratorio de esta complejidad en Paraguay, ya que el único hasta su inauguración era el del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa).
Según el director del laboratorio, Gustavo Chamorro, se trata de una construcción “totalmente nueva” y que cuenta con equipos de alta tecnología.
