El Norte anunció el mes pasado que iba a destruir las instalaciones de Punggye-ri, en el nordeste del país, haciendo explotar los túneles de acceso, un anuncio que fue aplaudido por Washington y Seúl.
En Punggye-ri se llevaron a cabo seis ensayos nucleares. El último, el más potente hasta la fecha, se efectuó en septiembre y habría sido el de una bomba de hidrógeno. El desmantelamiento se realizará entre el miércoles y el viernes, según las condiciones meteorológicas.
Corea del Norte presentó esta medida como un gesto de buena voluntad antes de la cumbre histórica entre Trump y el líder norcoreano Kim Jong Un, prevista el 12 de junio en Singapur. Pero la euforia que reinaba tras el anuncio de este encuentro ha dejado lugar a las dudas.
Fuente: AFP
