Grandes flagelos acechan a la niñez y la juventud de hoy en día, con el avanzado tránsito de la tecnología y las nuevas tendencias de los últimos tiempos, se ha llegado a la vulnerabilidad de estas nuevas generaciones, en diversos aspectos conocidos, como el uso desmedido del celular y ahora el cigarrillo electrónico, conocido popularmente como vapeador.
La expansión de los cigarrillos electrónicos comenzó presumiblemente a partir del año 2010, surgiendo como una opción para reducir el consumo del cigarrillo tradicional elaborado a base de tabaco.
En la actualidad se han impregnado como un bien comercial, bastante diseminados y con gran accesibilidad.
Por todos los motivos citados, actualmente las autoridades nacionales, encargadas de velar por el bienestar de los niños y adolescentes se encuentran enfocadas en asumir acciones que ayuden a erradicar este dispositivo muy popular entre jóvenes y adultos, tanto dentro de las instituciones educativas como fuera de ellas.
Es por ello, que el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC), ya había emitido una resolución N° 630 que trata acerca del uso del cigarrillo electrónico junto con sus causas y consecuencias, de modo, a que los establecimientos educativos puedan realizar proyectos para la prevención de tales casos, así mismo, ya varias instituciones de los diferentes departamentos del país, han elaborado planes de acciones, con talleres explicativos y reuniones conjuntas con los padres.
Ante esta realidad latente que tiene como blanco a los niños y jóvenes, instan a los padres a mantener la atención centrada en las actividades de sus hijos, de manera a prever y tomar decisiones acertadas, y por sobre todo, tempranas.
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