Este dinamismo responde a un desempeño integral: desde la oferta, todos los sectores crecieron; mientras que, desde el gasto, el consumo de las familias y las inversiones fueron los motores principales.
El crecimiento del trimestre fue liderado por el sector Servicios, que aumentó un 6,9%. Dentro de este rubro, destacaron el comercio, la intermediación financiera, el transporte y el sector de hoteles y restaurantes. Por su parte, la Manufactura mostró un avance significativo del 7,4%, gracias a una mayor producción de aceites, lácteos, textiles y productos químicos, aunque la industria cárnica registró una leve retracción que atenuó el resultado.
Otros sectores clave que apuntalaron el crecimiento fueron:
Electricidad y Agua (8,3%): Las binacionales se beneficiaron de un mayor caudal hídrico en el río Paraná, permitiendo una generación de energía superior a la del año pasado.
Agricultura (9,5%): A pesar de una menor producción de soja, el excelente desempeño en las cosechas de maíz, trigo, arroz y algodón impulsó al campo.
Construcción (3,4%): El sector mantiene su ritmo gracias a la ejecución de obras tanto públicas como privadas, incrementando la demanda de insumos nacionales.
CONSUMO PRIVADO Y EXPORTACIONES: EL GASTO QUE EMPUJA EL PIB
Desde la óptica del gasto, el crecimiento no se debe solo a lo que se produce, sino a lo que se consume. El consumo privado (el gasto de los hogares) y la formación bruta de capital fijo (inversiones en maquinaria y obras) fueron fundamentales. Asimismo, las exportaciones netas contribuyeron positivamente al balance.
Como contrapartida, el consumo del gobierno fue el único componente que presentó una contribución negativa, reflejando una postura más austera en el gasto público durante este periodo.
GANADERÍA Y MINERÍA: CRECIMIENTO CON MATICES
El sector primario, que incluye ganadería, forestal, pesca y minería, creció un 2,7%. En la ganadería, el dinamismo estuvo marcado por el faenamiento de aves y cerdos, así como una mayor producción de leche y huevos, lo que compensó un menor nivel de faenamiento de ganado bovino. La minería también aportó lo suyo con una mayor extracción de piedras y arenas para la construcción.
En resumen, Paraguay cierra el tercer trimestre de 2025 con una economía diversificada y en pleno vuelo, donde la industria y los servicios están tomando un protagonismo central junto a la tradicional fuerza del campo y la energía.