La Cámara Vial Paraguaya (CAVIALPA) realizó su V Foro de Infraestructura, con la presencia del presidente de la República, Santiago Peña, ministros del Poder Ejecutivo, legisladores, diplomáticos y representantes de organismos multilaterales. En el encuentro, la gremial del sector constructor pidió mejorar la calidad del gasto público y fortalecer la inversión en obras viales, sociales y energéticas como eje central del desarrollo económico y social del Paraguay. Cabe señalar que a nivel regional, Paraguay sigue rezagado, con una inversión en infraestructura que ronda el 2,6% del Producto Interno Bruto (PIB).
El titular de la cámara abrió el evento agradeciendo al presidente Peña; a la ministra de Obras Públicas, Claudia Centurión; al ministro de Economía y Finanzas, Carlos Fernández Valdovinos; al ministro de Industria y Comercio, Javier Giménez; y al ministro de Urbanismo, Vivienda y Hábitat, Juan Carlos Baruja, por su apoyo y participación.
También reconoció la presencia de representantes del Congreso, de la Cámara Paraguaya de la Construcción (CAPACO), del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), del Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF) y de organismos internacionales vinculados al sector.
El foro —realizado bajo el lema “El papel de la infraestructura en el desafío de duplicar el PIB del Paraguay en los próximos 10 años”— reunió a autoridades, empresarios, académicos, estudiantes y expertos internacionales para debatir el impacto de la inversión pública y privada en la generación de empleo, productividad y calidad de vida.
EL SECTOR GENERA HOY 240.000 PUESTOS DE TRABAJO DIRECTOS
Sarubbi señaló que detrás de cada ruta, puente, hospital, escuela o red eléctrica hay mucho más que materiales de construcción: hay oportunidades, integración y bienestar para las personas”, expresó el presidente de CAVIALPA durante su discurso. En ese sentido, el dirigente destacó que el sector de la construcción emplea actualmente a más de 240.000 personas de manera directa, además de generar una extensa cadena de valor que beneficia a miles de proveedores en todo el país. En ese sentido, sostuvo que duplicar el PIB en diez años implica duplicar también el empleo, los ingresos y las oportunidades para todos los paraguayos.
“Cada nueva obra moviliza a jóvenes, técnicos, docentes y universidades. Genera sentido de pertenencia y esperanza, además de impulsar la economía nacional”, sostuvo. Recordó que la expansión de la infraestructura no solo dinamiza la actividad económica, sino que también aumenta la recaudación tributaria, lo que permite al Estado invertir más en educación, salud y seguridad.
El titular del gremio subrayó que la visión de CAVIALPA es mantener y ampliar esa cadena de empleo y progreso, apostando por un desarrollo sostenido y previsible a través de políticas públicas estables. “Para hacer realidad esta visión —dijo— se necesita la firme decisión de invertir cada vez más en infraestructura, con la participación del Estado, el sector privado y los organismos multilaterales de crédito”.
LIMITACIONES FISCALES
No obstante, advirtió que el Paraguay enfrenta limitaciones fiscales que restringen la capacidad de inversión pública. “Entendemos que las reglas fiscales son necesarias para mantener el equilibrio macroeconómico, pero también deben servir para innovar, no para frenar el desarrollo”, indicó.
En ese sentido, propuso buscar mecanismos sostenibles y transparentes que multipliquen la inversión pública mediante la participación del sector privado, a través de asociaciones público-privadas (APPs), fondos de infraestructura y una planificación estratégica de largo plazo que trascienda los periodos de gobierno. “El desafío no es solo gastar más, sino gastar mejor. Mejorar la calidad del gasto público permitirá liberar recursos para seguir cerrando la brecha que aún tenemos en infraestructura”, remarcó.
Enfatizó que invertir en infraestructura no es un gasto, sino una decisión estratégica, porque cada guaraní destinado al sector retorna multiplicado por cuatro o cinco veces en inversión privada, generando empleo, competitividad y cohesión social. “Invertir en rutas, energía y vivienda es sembrar progreso”, sostuvo.
Durante su intervención, reafirmó el compromiso del gremio con la transparencia, la eficacia y la calidad de las obras públicas, e instó al Gobierno a incluir al sector privado en las mesas de trabajo donde se diseñan las políticas públicas, para convertirlas en verdaderas políticas de Estado.
“Queremos ser socios del Estado en la construcción de un país más conectado, más justo y más próspero. Este foro es una oportunidad para construir consensos, alinear visiones y definir juntos una hoja de ruta que haga de la infraestructura el cimiento del futuro que todos soñamos”, afirmó.
En la parte final de su discurso, hizo un llamado a la unidad nacional y a la confianza en las capacidades del país. “Paraguay es un país bendecido: tenemos energía abundante, tierras fértiles, estabilidad política y un pueblo trabajador. El mundo empieza a reconocer ese potencial, pero depende de nosotros aprovecharlo”, expresó.
“Si trabajamos juntos —Estado, sector privado y ciudadanía— con visión, patriotismo y compromiso, no habrá límites para lo que el Paraguay pueda alcanzar”, concluyó, destacando que el futuro del país “debe construirse entre todos”, subrayó.
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