Filadelfia,RCC.- Ella viaja con el barco Logos Hope operado por la Organización Caritative Cristiana Alemana sin ánimo de lucro de nombre GBA Ships. Logos Hope presenta la librería flotante mas grande del mundo y viajan de puerto a puerto para compartir ayuda, conocimiento y esperanza.
En contacto con RCC se preguntó a Chiara cómo fue que decidió emprender este viaje, a lo que respondió:
Desde que conocí lo que hace el barco de Logos Hope, quise ser parte de lo que ellos hacen en los puertos a los que visitan. Así que después del colegio apliqué para hacer el programa de voluntariado. Con el apoyo de mi familia, iglesia y amigos logré unirme al barco y ha sido una experiencia única.
Ella es parte del equipo avanzado que prepara el puerto y realiza los contactos para la visita del barco. Además cuentan con diferentes organizaciones y gente para que esto sea posible.
Por otra parte, el trabajo de ayuda y asistencia es como expresión del amor de Dios y preocupación por la gente en países necesitados toma distintas formas: asistencia médica, proyectos de construcción o grandes donaciones de literatura así como también donaciones de comida o ropa.
Chiara emprendió viaje el 1 de agosto del 2019, al principio para quedarse hasta setiembre de este año. Pero debido a otras oportunidades que le surgieron, su viaje se postergó hasta abril del 2022. Con una pausa que le permite volver a Paraguay en el 2021 por nueve semanas. Después del plazo cumplido con el voluntariado en el barco, ella retornará definitivamente a Paraguay.
Esta experiencia ha permitido a Chiara conocer 14 países y recorrer los diferentes puertos de América Latina y el Caribe. Además todavía le queda por recorrer Europa y probablemente el Norte de África.
Entre las satisfacciones que le brinda esta aventura ella mencionó:
«Crecí bastante en mi fe y además siempre me alegra ver la sonrisa de la gente cuando nos visitan y conocen a las distintas culturas del barco.»
Por supuesto hay tiempos de desánimo y en ese caso ella cuenta:
«Obviamente pase por situaciones que no fueron fáciles. Especialmente cuando tuve que despedirme de mis mejores amigos. Pero también hay momentos en los que extraño mucho a mi familia y amigos (y al asado). Pero en estos momento recuerdo el por qué estoy aquí. Además tengo a mi familia apoyándome. Son estos momentos de esperanza los que me dan ánimo para seguir adelante.»
¿Si vale la pena invitar a otros a que hagan los mismo?
«Definitivamente!!! Creo que este lugar es una de las mejores escuelas por las que jamas volveré a pasar. Aprendí tanto de mí misma, de mi fe y también de otras culturas y cómo convivir en paz con todos.»
El hecho de viajar solamente no debería ser la motivación principal para aplicar a esta aventura, sino de ayudar a los demás y crecer en lo personal, así que te animo a que te contactes con nosotros, finalizó Chiara.
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