Ubicada estratégicamente a 14 kilómetros de la ciudad de Loma Plata y a 18 de la ruta bioceánica, la nueva planta algodonera de la Cooperativa Chortitzer ocupa un área de 100 hectáreas, con aproximadamente 10.000 metros cuadrados destinados a tres galpones fundamentales. Estos incluyen espacios para la sala de máquinas, almacenamiento de semillas con capacidad para 9.000 toneladas, y un último galpón dedicado al resguardo y embarque de los productos finales, es decir, la fibra de algodón.
La planta cuenta con una capacidad máxima de procesamiento de 60 fardos por hora, lo que equivale a aproximadamente 900 toneladas de algodón en rama diarias, resultando en 11 contenedores de fibra y unas 14 cargas de semillas cada día. Actualmente, la Cooperativa Chortitzer cuenta con cerca de 200 productores asociados y emplea directamente a 70 colaboradores en turnos continuos de 24 horas, seis días a la semana.
Una característica destacada de esta nueva instalación es su capacidad de limpieza y secado del algodón en rama, respaldada por un sistema semi automatizado de gestión de la humedad desde la alimentación de la planta hasta el producto final, una tecnología única en el país.
El enfoque de exportación es evidente en la producción de fibra de este año, destinada principalmente a países como Alemania, Turquía, Bangladesh, Indonesia y Vietnam, todos interesados en la calidad distintiva del algodón paraguayo.
Es crucial resaltar la importancia histórica del rubro algodonero en la Cooperativa Chortitzer en el Chaco, que se remonta a 1928, consolidándolos como pioneros en la producción de algodón chaqueño con casi un siglo de experiencia ininterrumpida.
El Chaco, caracterizado por su clima adverso, encuentra en el algodón un cultivo ideal que se adapta a las difíciles condiciones climáticas. La Cooperativa ha demostrado su compromiso con la investigación y desarrollo, invirtiendo considerablemente para alcanzar niveles óptimos de producción y resistencia a las variaciones climáticas.
El despliegue de este nuevo proyecto ha sido un desafío significativo, desde la coordinación de toda la cadena de producción hasta la capacitación constante de productores y personal involucrado. Sin embargo, estos desafíos forman parte del plan estratégico para impulsar continuamente el desarrollo del agro chaqueño y consolidar la posición de Paraguay en el mercado internacional del algodón.