Todo esto nos muestra primeramente la generosidad del pueblo paraguayo, “sobre gustos no hay nada escrito”, pero el artista del viernes en la noche es bastante cuestionado por su forma de “cantar”, muchos dicen que lo hace “bostezando”, y ni hablemos de la letra de sus canciones que son los mejores antivalores que hoy podemos encontrar, en fin… el punto de esto no es cuestionar la vocalización de un artista internacional, si llegó a este nivel de llenar un estadio de 45.000 espectadores y tiene a personas formando filas desde la madrugada incluso, es por algo, pero creo que uno debería pensar dos veces antes de consumir sus canciones o peor aun, permitir que sus hijos lo escuchen.
El punto de este artículo es ¡Que plata tiene el pueblo paraguayo!. Me sorprende como es que los eventos, sin contar los otros tantos que seguro habrá este fin de semana, se llenan y de una fácil y rápida manera que a estas horas de la jornada las personas sigue buscando en reventa algunas boletas que de seguro su valor inicial ya asedio a quien sabe cuántos guaraníes, y eso que tuvimos un feriado de por medio que si bien no podíamos salir de nuestros hogares, se aprovechó para un asadito en familia y en mucho de los casos se continuo hasta la tarde y noche.
Ni esperanza de llegar a fin de mes a esta altura del campeonato, y apelamos a la quincena que resta aun una semanita para llegar al “adelanto”, pero tres estadios se llenaron en un “sapyaite”, sin pestañear la muchachada pago por sus entradas. ¡Ojo! No pongo en tela de juicio la importancia de todos estos eventos sean deportivos o artísticos, lo que destaco es que en Paraguay hay plata Señores.
Haciendo una suma rápida, si agregamos al precio de la entrada una cenita, unos traguitos más y la movida misma de la noche, este fin de semana se moverá mucho dinero en varias partes. Seamos razonables en el uso del billetito que cuesta conseguirlo.
Con cariño.
Pedro Segovia