Pero me hago un cuestionamiento y también a las autoridades responsables de tan grande evento:
• Descontrol, alcohol, droga, nada de control, nada de seguridad ¿y se alarman por lo sucedido?
• Libre venta de alcohol durante todo el concierto y muchos ya iniciaron incluso el viernes y terminaron el domingo, ¡terrible! ¿Y dónde quedaron los controles?
• Donde hay alcohol y descontrol siempre hay droga y también quien las vende andan por la zona… me pregunto, ¿será que la SENAD estuvo en el lugar con sus “controles” de rutina al menos?
• ¿Cómo puede ser que personas con frondosos antecedentes estén circulando libremente por nuestras calles y que incluso tenga acceso a este tipo de eventos?
El evento de ja’umina fest resaltó por las ventas libres de bebidas alcohólicas, el escaso control de personas que ingresaron al evento, y la inseguridad predominó durante su desarrollo; angustia y desesperación reinaron en el lugar. ¿Acaso 300 guardias privados no fueron suficientes? ¿Se encontraban capacitados para controlar a tantas personas? Las respuestas ante estas preguntas hablan por sí solas; escaparon de los organizadores el control pertinente de los asistentes, y para completar las autoridades de la ciudad no son suficientes ante un público masivo.
Pónganse a pensar, ¿Dónde quedaron los valores?, la responsabilidad de resguardar la vida de cada persona, el compromiso de control, el amor al prójimo como para realizar semejante vandalismo, un segundo se detuvo el tiempo al escuchar los disparos, y el pánico inundó el lugar.
Insto a autoanalizarnos como sociedad y buscar una manera de fomentar principios y valores; no es un mal momento para sentarnos a pensar que es lo que estamos sembrando en nuestros hogares, como estamos influenciando en una nueva generación, como repercutirá estos hechos a futuro.
Por último, la vida es un instante, amemos, cuidemos y valoremos a las personas de quienes nos rodeamos, nunca sabremos cuándo podría ser el último día de nuestras vidas, vivamos una vida plena y sana y no tengamos en poco a nuestra juventud.
Les dejo el siguiente versículo deseando paz en este momento tan difícil que vive el país
«NO temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te fortalezco; siempre te ayudaré; siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia». Isaías 41:10