Con miras al inicio de clases de este 20 de febrero, voluntarios de una fundación se han encargado de adaptar los útiles escolares para que los niños, niñas y adolescentes con discapacidad puedan utilizarlos, indicando que con estos materiales adaptados fortalecerán la autonomía, la independencia lo que conlleva a que los chicos se sientan mejor consigo mismos, fortalezca sus relacionamientos con los demás y, principalmente, facilitará a que los estudiantes continúen con sus clases.
Los voluntarios también han indicado que solo el 6% de los niños y adolescentes asisten a una institución educativa, de este total, un 83% no permanece más de 6 años en los centros educativos, y siendo solo el 8% los que logran culminar el colegio. De estos, solo un 2% logran realizar estudios universitarios.
Aún hay mucho por realizar dentro de los instituciones públicas y privadas para que los niños, niñas y adolescentes cuenten con espacios más inclusivos y accesibles, para que no los estudiantes con discapacidad puedan ingresar al sistema educativo y no desistan de continuar con su formación académica.
Los voluntarios han preparado reglas antideslizantes, lápices, pinceles y brochas con varios tipos de agarradores, tijeritas con mangos de goma, entre otros más. Los útiles escolares elaborados por los voluntarios serán donados a tres centros educativos.