Tanto Efraín Alegre, de la Alianza Ganar, como Mario Abdo Benítez, del gobernante Partido Colorado expusieron sus propuestas en un debate moderado por los periodistas Menchi Barriocanal, Carlos Peralta y Carlos Troche.
La organización Desarrollo en Democracia propuso como esquema el de una pregunta y luego dos repreguntas a cargo de los moderadores, en la pregunta los candidatos tenían 90 segundos para responder y en las repreguntas tenían 60 segundas para dar su parecer.
Alegre inició el debate con la promesa de reducir los costos del servicio de provisión de energía de la ANDE, mientras que Abdo Benítez agradeció la oportunidad de poder debatir entre los candidatos.
El primer eje lo marcó el desarrollo económico y el medioambiente, Abdo Benítez aseguró que derogará el decreto impulsado por Horacio Cartes que permite la deforestación de algunas tierras en el Chaco.
En desarrollo económico ambos candidatos presentaron sus modelos, Alegre aseguró que cambiarán la política rentista y buscarán darle valor agregado a la energía de Itaipú, hoy cedida al Brasil, impulsando las industrias y que sean estas que utilicen esa energía que hoy es vendida al país vecino.
En el siguiente eje temático los candidatos expusieron sus ideas sobre educación e inclusión social, el primero como tema recurrente en cada elección.
Abdo Benítez expuso que desea «derrumbar la muralla que separó a la educación de la política», involucrando a todos los sectores incluso de la sociedad civil en esta mejora y que se vuelva una «causa nacional»:
En ese sentido, Alegre reclamó al presidenciable colorado el hecho de días atrás haber dicho que los ministros estarán con pañuelo colorado y ahora decir que quiere despartidizar la educación, más tarde expuso sobre los tres ejes temáticos que incluyen su propuesta; formación docente, infraestructura y merienda escolar.
Siguió el debate donde los candidatos expusieron sobre gobernabilidad e instituciones, en este puntos ambos coincidieron en la reforma del sistema judicial como eje principal de una eventual constituyente, además de asegurar que ninguno buscaría su reelección.
Al hablar de salud, los candidatos expresaron puntos de vistas distintos, Alegre propone volver a instalar la salud gratuita y las unidades de salud familiar, que el asegura durante le gobierno de la última alianza fueron instaladas unas 700 unidades.
Por su parte, Abdo Benítez dijo que buscará la integración de todos los sistemas de salud incluyendo al Instituto de Previsión Social, además de asegurar que el próximo endeudamiento será para invertir en el sistema de salud y potenciar la desburocratización de la compra de insumos para ese sector.
Por último los candidatos expusieron sus ideas sobre seguridad física o inseguridad, y seguridad jurídica, mientras Abdo Benítez propone mejorar las funciones de la Fuerzas de Tarea Conjunta (FTC), el presidenciable liberal expuso que desea acabar con las mismas, a lo que el candidato colorado señaló como «un golpe a la moral de la policía y los militares».
Durante todo el desarrollo del debate se evitaron las confrontaciones, salvo pocos momentos donde Alegre reclamó a Abdo el crecimiento de su patrimonio, o donde el mismo exhibió una bandera paraguaya que luego uno de los moderadores pidió que se guarde.
Del debate participaron en su mayoría exministros y autoridades actuales, duró poco más de dos horas y se abordaron cinco temas.