Ante esta situación, Senacsa solicitó “alerta máxima” a funcionarios de las regiones sanitarias, jefes de unidades zonales, controles en puntos de ingreso al país, productores y ciudadanía en general. El objetivo es reforzar la vigilancia y notificar inmediatamente cualquier avistamiento de aves enfermas o muertas, especialmente en zonas fronterizas o de producción avícola.
Además, el organismo recordó que no se deben manipular aves con signos de enfermedad o fallecidas, ya que esto representa un alto riesgo de contagio. “La rápida notificación permitirá tomar acciones sanitarias adecuadas para evitar la propagación de la enfermedad en el país”, señaló el Senacsa en su comunicado.
La institución también habilitó líneas telefónicas para reportes: (0982) 567-525, (021) 729-0015, interno 1215, y el número 158. Asimismo, instó a la ciudadanía a acudir a la unidad zonal más cercana para reportar cualquier sospecha.
Cabe destacar que Brasil es el mayor exportador de pollo del mundo y, solo en lo que va de 2024, China —uno de sus principales compradores— había adquirido más de 560.000 toneladas de carne aviar. Tras el brote, el gigante asiático restringió las importaciones provenientes de todo el territorio brasileño, lo que podría tener impacto económico global.