En la conversación, Peña fue consultado sobre el impacto de un eventual regreso de Donald Trump a la Casa Blanca para Paraguay y América Latina. “El presidente Trump no es solo una oportunidad para Estados Unidos, sino para el mundo entero, para mejorar y dar más visibilidad a una agenda positiva. Necesitamos hacernos más fuertes, y eso es posible invirtiendo en la gente”, afirmó el mandatario.
Peña también resaltó el beneficio del apoyo continuo de Paraguay a Taiwán, destacando que esta alianza ha contribuido al desarrollo del país, diferenciándolo de otros en la región. “No podemos poner el interés económico por delante de los valores y los principios”, expresó, reafirmando su compromiso con las políticas basadas en principios éticos y diplomáticos.
Otro punto abordado fue el reciente traslado de la embajada paraguaya de Tel Aviv a Jerusalén, una decisión que marcó un hito en las relaciones con Israel.
El presidente recordó que esta medida se dio tras superar tensiones diplomáticas originadas en 2018, cuando el expresidente Mario Abdo Benítez decidió mudar la delegación a Tel Aviv.
El viaje de Peña a Estados Unidos también generó controversia, ya que el mandatario buscaba asistir a la asunción de Donald Trump, pero quedó fuera de la ceremonia por cuestiones de espacio en el Capitolio. Según Cancillería, su invitación fue gestionada por el senador de Florida, Rick Scott, y no era directa.
A pesar de las críticas en torno a su viaje, el mandatario paraguayo aprovechó su estadía para resaltar el papel de Paraguay en el escenario diplomático y su compromiso con estrategias que promuevan el desarrollo y la estabilidad global.