“Yo les di mi palabra. Vamos a trabajar por un sistema de salud de calidad, sensible y humano” de esta manera, a través de sus redes sociales, el presidente electo Santiago Peña daba a conocer el comunicado en el cual anunciaba que el Dr. Felipe González no asumiría la titularidad del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPyBS).
González es el primer cambio dentro del gabinete de Peña, antes de asumir el mando del país. El cambio se da tras las polémicas y desacertadas declaraciones del médico sobre los pacientes en fase terminal y los amparos judiciales que suelen presentar para ser internados y asistidos en los diferentes centros hospitalarios del país.
Peña dentro de su comunicado destaca que, “La ciudadanía confío en nosotros por una razón, fuimos la mejor promesa electoral para trabajar por el bienestar de los paraguayos y es lo que vamos a hacer desde el primer hasta el último colaborador”. Asimismo señaló que, “Salud Pública tendría prioridad absoluta, no solo en lo que respecta a equipamientos y recursos, sino también en llevar adelante una gestión sensible y humana, para cada uno de nuestros compatriotas. La empatía con la ciudadanía será un elemento indispensable en la gestión.”
Finalizando el comunicado remarcó que la asunción del Dr. González no se dará, “Con la firmeza y coherencia que me corresponde ostentar desde el liderazgo que ocupo, anuncio que el doctor Felipe González no ocupará la función de Ministro de Salud, como fue anunciado en principio”.
Cabe mencionar que, las declaraciones brindadas por González generaron zozobra entre los pacientes y los familiares, así como una gran preocupación dentro de la ciudadanía en general ante la posibilidad de la implementación de la eutanasia en nuestro país.
Incluso el mismo Peña cuando fue consultado acerca de las expresiones del Dr. González, mostró su preocupación y su desaprobación “Veo con un poco de preocupación. Creo que hay estadísticas de lo que ocurre en Salud, pero hay una condición humana que tenemos que ser sensibles sobre los pacientes terminales y las familias, entonces hay una enorme responsabilidad del Estado, no solamente atender las necesidades sino entender la problemática emocional que implica tener que lidiar con la enfermedad, muchas veces, la parte más difícil.”
Es importante destacar que, nuestra Carta Magna indica en la Ley Nº 1032, en el Capítulo I “Del Sistema Nacional de Salud”, en su Art. N° 3 que, “El Sistema tiene como finalidad primordial prestar servicios a todas las personas de manera equitativa, oportuna y eficiente, sin discriminación de ninguna clase, mediante acciones de promoción, recuperación y rehabilitación integral del enfermo”.
Es imperativo que en el país las personas que asuman la titularidad del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social, sean profesionales idóneos que trabajen para mejorar la calidad de vida de la población, respetando la dignidad y los derechos de cada individuo, y promoviendo la equidad en la asistencia médica, en lugar de buscar soluciones basadas únicamente en consideraciones financieras.