Según sus organizadores, más que un congreso, este encuentro busca ser un espacio para transformar vidas, reuniendo a familias, profesionales, organizaciones e iglesias comprometidas con brindar seguridad, amor y contención a quienes más lo necesitan. “Dios hace habitar en familia a los desamparados”. Salmo 68:6.
Al respecto, Anja Goertzen, una de las organizadoras del evento, comentó a RCC Radio que hace años vienen colaborando con el Gobierno, a través del Ministerio de la Niñez y Adolescencia, con la idea de mejorar el sistema de protección familiar en nuestro país. “Es muy común decir en Paraguay que es muy difícil, pero hoy estamos viendo que se está priorizando esta causa de cuidar a niños en familia”, manifestó.
Añadió que es un proceso que se viene trabajando de tiempo atrás, y Paraguay Protege Familia (PPF) es un movimiento que nació de familias evangélicas que tuvieron niños adoptados, pensando en que ningún niño debe vivir como huérfano, y creyendo en el corazón de Dios y en su plan.
Conforme con los datos, en el país más de 800 niños y adolescentes esperan un lugar donde anclar y un corazón que les diga “aquí estás seguro”. El Congreso PPF pretende ser un punto de encuentro para quienes creen que cada vida puede ser restaurada en el seno familiar.
Durante los dos días, los participantes podrán acceder a talleres, mesas de coaching, plenarias y testimonios reales, compartiendo experiencias y herramientas para fortalecer la protección y el acompañamiento en familia. La invitada especial de esta edición es Aixa de López, proveniente de Guatemala, quien aportará su perspectiva y conocimiento en temas de acogimiento y adopción.
El viernes 17, las actividades se desarrollarán de 18:30 a 21:00 horas, mientras que el sábado 18 se extenderán de 8:30 a 16:00 horas. La entrada es libre y gratuita, invitando a toda la comunidad a participar de este espacio de aprendizaje, reflexión y esperanza.
El IV Congreso PPF 2025 se consolida como un puerto seguro para quienes trabajan y sueñan por un Paraguay, donde cada niño y adolescente tenga un hogar, cuidado y protección, reafirmando el compromiso social y familiar con las nuevas generaciones.
