Esta mañana, el presidente de la República, Santiago Peña, pronunció un significativo discurso durante la primera Sesión Plenaria de la Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos (OEA). Ante ministros de Relaciones Exteriores, jefas y jefes de delegación, y altos funcionarios como el Secretario General Luis Almagro y el Secretario General Adjunto Néstor Méndez, Peña subrayó la convicción de Paraguay en la importancia del multilateralismo hemisférico, la diplomacia y las negociaciones de buena fe.
El mandatario paraguayo enfatizó que «la República del Paraguay cree firmemente en la relevancia del multilateralismo hemisférico, la diplomacia y las negociaciones de buena fe» como las mejores herramientas para avanzar en los objetivos comunes de la región. Peña destacó el rol esencial de la OEA como foro de debate político, donde todas las naciones, sin importar su tamaño o poder, son escuchadas y sus necesidades atendidas.
Peña hizo un llamado a la colaboración de todos los países y ciudadanos de la región para construir una América soberana y próspera. «Una golondrina nunca hace primavera, señores – tenemos que estar todos juntos», afirmó el presidente, destacando la necesidad de trabajar juntos por el fortalecimiento de la OEA, la «casa común» donde se pueden defender y promover la paz, la democracia y los derechos humanos.
En un momento crucial de su discurso, Peña condenó enérgicamente el reciente intento de levantamiento militar en Bolivia, expresando su total respaldo al presidente Arce y a las instituciones democráticas bolivianas. «Nuestro continente no puede consentir ni dictaduras ni quiebres democráticos. La voluntad popular y la democracia son sagradas. Deben ser respetadas siempre», afirmó Peña.
El presidente también aprovechó la ocasión para anunciar la candidatura del canciller Ramírez Lezcano al cargo de Secretario General de la OEA, confiando en que bajo su liderazgo, la organización avanzará en el desarrollo y bienestar de todos los países miembros.
Peña concluyó su discurso instando a los participantes de la Asamblea a mantener el diálogo, el respeto y la tolerancia para construir consensos inteligentes, recordando las palabras del escritor mexicano Octavio Paz: «todas las grandes cosas que los hombres hemos hecho, han sido hijas del diálogo». Con este espíritu, el presidente paraguayo expresó su confianza en que trabajando juntos, se podrán lograr resultados concretos y tangibles en los desafíos compartidos, desde la inseguridad y el crimen organizado hasta el cambio climático y la pobreza.