El cobro de un peaje fluvial por parte de Argentina en la Hidrovía Paraguay-Paraná sigue siendo un tema de preocupación para el sector naviero regional. Según confirmó Bernrd Gunther, expresidente del Centro de Armadores Fluviales y Marítimos del Paraguay (CAFyM), actualmente las embarcaciones pagan un monto «transitorio» de USD 1,20 por tonelada de registro neto, sin que exista una contraprestación efectiva ni una estructura de costos clara.
“No se ha presentado aún un desglose detallado de costos que justifique ese valor. Se dijo que era una medida provisoria mientras se acuerda una tarifa final, pero seguimos sin avances concretos”, expresó Gunter en comunicación con RCC.
El conflicto se remonta a más de dos años atrás, cuando Argentina impuso el peaje unilateralmente. Aunque inicialmente era de USD 1,47, desde octubre de 2023 se estableció una tarifa reducida de USD 0,80, que luego aumentó a USD 1,20. Las navieras aseguran que esto impacta negativamente en los costos logísticos, especialmente porque se cobra tanto en la ida como en el regreso, incluso con las embarcaciones vacías.
Además, Gunter explicó que no se han visto mejoras en la navegabilidad de los tramos donde se cobra el peaje:
“Cuando uno paga un peaje en una buena ruta, lo hace con gusto. Pero en este caso no se ve ninguna mejora en el río que justifique el cobro”.
En la mesa técnica conformada entre los armadores y las autoridades argentinas aún no se ha llegado a un consenso. Mientras tanto, las navieras paraguayas —y también brasileñas y bolivianas— representadas en el CAFyM insisten en que el valor justo sería volver a los USD 0,80 hasta que se defina una nueva concesión oficial.
El impacto económico no es menor. “Multiplicado por millones de toneladas, el sobrecosto es altísimo”, dijo Gunter, quien también alertó que el precio del transporte termina repercutiendo en los productos importados que llegan al Paraguay: combustibles, alimentos, electrodomésticos, vehículos y otros bienes de consumo masivo.
“Al final no es solo un tema de las navieras. Este peaje injustificado puede encarecer toda la cadena logística y afectar directamente a los consumidores paraguayos”.
El reclamo también se ampara en el Tratado de la Hidrovía Paraguay-Paraná, firmado por los cinco países involucrados (Argentina, Paraguay, Brasil, Bolivia y Uruguay), que establece que cualquier tasa cobrada debe estar justificada por una prestación de servicio efectiva.
Desde CAFyM reiteran que no se oponen al cobro, siempre que haya transparencia, mejora en la infraestructura y acuerdo regional. Mientras tanto, siguen a la espera de una resolución definitiva por parte de la Agencia Nacional de Puertos y Navegación de Argentina (ex AGP, ahora Lampin), que actualmente está redactando un nuevo pliego para concesionar ese tramo del río.
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