Arriola recordó que en la más reciente sesión del Consejo de la Hidrovía, conformado por Paraguay, Brasil, Bolivia, Argentina y Uruguay, se determinó que las documentaciones presentadas no justifican el cobro de una tarifa para el paso de embarcaciones en un tramo del Río Paraná.
«Resulta crucial el levantamiento de toda medida unilateral que genere costos adicionales. Estos costos anulan la previsibilidad del intercambio comercial, reducen la competitividad del bloque y aumentan las tensiones internas, por sus implicancias económicas y sociales», expresó el canciller en su discurso.
«La libre navegabilidad de los ríos internacionales es indispensable, donde la Hidrovía Paraguay–Paraná cumple un rol trascendental para facilitar el comercio exterior de los cinco países signatarios del Acuerdo de Santa Cruz. Por lo que cualquier medida unilateral e inconsulta en contravención con las disposiciones vigentes que afecte la competitividad de la navegación fluvial comercial encontrará siempre nuestra firme oposición», agregó.
La documentación presentada por Argentina indica la necesidad de cobra un peaje (de US$ 1,47 por tonelada de embarcación) por servicios de señalización, cambio de trazas y un sistema de identificación automática para conocer en tiempo real el posicionamiento de las embarcaciones y la navegación nocturna.
Los demás países que comparten la Hidrovía señalaron que los documentos fueron insuficientes para justificar el cobro del peaje y se elevó al Comité Intergubernamental de la Hidrovía (CIH) la resolución de la controversia.