Desde los cruces fronterizos hasta el Aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi, el equipo de la Secretaría Nacional de Turismo (Senatur) ofreció a los visitantes una experiencia inolvidable con atención personalizada, información turística, y obsequios típicos del país, consolidando la imagen de Paraguay como un destino único.
Además, la instalación de pantallas gigantes en puntos estratégicos como Turista Roga de Palma, Puerto de Asunción, y las costaneras Norte y Sur permitió que los hinchas sin entradas compartieran la emoción de la final, creando un ambiente de unidad y festejo.
El programa «Buen Anfitrión» posicionó a Paraguay como un referente en la organización de eventos internacionales, consolidando su reputación como un destino turístico acogedor y eficiente.
La final de la Copa Sudamericana fue más que un partido: fue una celebración del fútbol, el turismo y la hospitalidad que dejó una huella duradera en la memoria de los visitantes y en la proyección global del país.