En ese sentido el titular de la Federación de Educadores del Paraguay, Silvio Piris, dijo no estar en contra de la creación de una superintendencia de pensiones, sin embargo acotó que es necesario dialogar con los sectores afectados a fin de tener una ley que proteja los intereses de los que aportan a las jubilaciones.
«Queremos que se rechace y todos juntos con el ministerio de Hacienda del Gobierno, las centrales obreras y todos los gremios tratar punto por punto, artículo por artículo, y posteriormente presentar en forma consensuada un proyecto que sea beneficioso a todas las partes», dijo Piris.
Explicó que la ley contiene artículos «perjudiciales» para el trabajador con los que se pretende utilizar los fondos de las cajas de jubilaciones, algo a lo que no se oponen pero para la cual necesitan las garantías de que esas inversiones sean seguras y constituyan un fortalecimiento para esas cajas de pensiones.
Piris agregó que es importante la existencia de un ente contralor que va a marcar las pautas para que los administradores de las cajas no usen con tanta «discrecionalidad» los recursos.
Criticó la figura del superintendente de pensiones que puede plantear reformas en un especie de «súper poder» que con esas atribuciones podría llegar a ampliar la cantidad de años de aporte para jubilarse o incluso establecer una edad mínima a más de 60 años.
«Eso implicaría que un docente trabaje 37 o 38 años para jubilarse, hoy lo puede hacer con 25 años de aporte. También conllevaría a que se aumente el porcentaje de aporte para la jubilación», explicó el sindicalista.
A la movilización de los docentes se sumaron distintos gremios de otros sectores, algo que para Piris es positivo para los trabajadores que necesitan estar unidos por los mismo derechos.
«Será un punto de partida, un antes y un después de lo que está sucediendo en Paraguay, ojalá que a partir de ahora esto sirva como un ejemplo y todos los gremios salgan a pelear unidos por los mismos derechos»
La marcha de los trabajadores culminó en la plaza frente al Congreso donde se encontraban campesinos del Movimiento Agrario Popular y tuvo lugar una sátira con personajes como Horacio Cartes, Lea Giménez, Mario Abdo Benítez y hasta el propio presidente estadounidense, Donald Trump.
Representantes sindicales se reunieron luego con el titular de la Cámara Alta Fernando Lugo, Cámara que debe revisar el proyecto y donde esperan sea rechazado y luego empezar a trabajar en un nuevo proyecto con la participación de todos los sectores.