La actividad se desarrolló los días 3 y 4 de setiembre en el Hotel Granados Park de Asunción, bajo la organización conjunta del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la Asociación Iberoamericana de Financiación Local (AIFIL), la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Asunción (FCE-UNA).
Durante su disertación, el subsecretario Lovera presentó en detalle la distribución de recursos entre los gobiernos municipales y advirtió sobre las asimetrías en el desarrollo territorial. “Los recursos nunca son suficientes, pero muchas veces tampoco responden a un diagnóstico de necesidades reales del municipio, tanto en lo económico como en lo social”, expresó.
AUTONOMÍA NO ES IGUAL A DISCRECIONALIDAD
Al respecto, explicó que la autonomía no debe confundirse con discrecionalidad. “Los recursos deben destinarse a políticas públicas que generen impacto. A veces se utilizan en cuestiones que no aportan al desarrollo, y ahí es donde hablamos de la necesidad de eficiencia en la gestión”, remarcó.
El viceministro Lovera también señaló que los esfuerzos de los gobiernos departamentales y municipales no deben competir con las directrices de la Administración Central, sino complementarlas.
Sobre el punto anterior, insistió en que se requiere planificación y coordinación para que el bien o servicio público llegue al ciudadano, no solo con eficacia, sino con eficiencia y al menor costo posible. Asimismo, destacó que las transferencias a los gobiernos locales buscan fortalecer la institucionalidad y mejorar los servicios públicos, al tiempo de reducir desigualdades territoriales y garantizar la transparencia.
PERSISTEN “IMPORTANTES DESAFÍOS”
Subrayó que persisten importantes desafíos para los gobiernos locales, como la construcción de políticas públicas basadas en evidencia, la inversión en capital humano y físico, el fortalecimiento de los canales de interacción con la ciudadanía, la compatibilidad de los instrumentos con los sistemas de información institucional, la mejora de la capacidad de gestión financiera y operativa, la transparencia en el acceso a la información, y la planificación estratégica alineada al Plan Nacional de Desarrollo 2050.
Concluyó que avanzar en estos ejes será clave para que los gobiernos locales se consoliden como “verdaderos motores” del desarrollo territorial y del bienestar ciudadano.
