María Selva Morínigo, se presentó el pasado martes y fue enviada al penal de mujeres, del Buen Pastor. La defensa de la mujer recurrió al fallo del juez José Delmás y este lunes, el Tribunal de Apelaciones brindó el arresto domiciliario.
La Fiscalía confirmó el pedido de arresto domiciliario para María Selva Morínigo, bajo el argumento de que la hija de la mujer está con problemas de salud.
El juez Pedro Mayor Martínez comentó que para revocar la medida de prisión preventiva el Tribunal de Apelación estudió tres puntos: lo primero tiene que ver con el requerimiento del Ministerio Público que se rectificó en su posición inicial, lo segundo tiene que ver con la conducta de la procesada y tercero porque no consideran que Morínigo pueda fugarse debido al bloqueo de cuentas.
“Entre otro de los fundamentos que hemos visto, el Ministerio Público en coordinación con la Magistratura, ha sido el eficiente bloqueo de cuentas y del embargos de bienes de los imputados. Por lo que sumado a la requisición del Ministerio Público, con la conducta procesal de la imputada nos lleva a considerar que la prisión preventiva es excesiva para controlar la sujeción del proceso”, indicó el juez.
Añadió también que dispuso la realización del control policial aleatorio. “De manera sorpresiva podrán constituirse al domicilio para verificar sí la misma se encuentra ahí. También autorizamos la aprehensión de la misma, en caso de ser incumplida la medida cautelar”, refirió Mayor Martínez.
Morínigo se encuentra imputada por lavado de dinero, en el mismo caso en el que su marido, Javier Díaz Verón, está procesado por enriquecimiento ilícito. Este último se encuentra recluido en el penal de Tacumbú.