El objetivo del documento es establecer un plan de acción con los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial para la protección y desarrollo de las comunidades indígenas en todo el país. El mismo inició su elaboración en 2014 con el compromiso asumido por Paraguay para cumplir con la Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas.
Desde esa fecha se han realizado 18 jornadas de consulta con la participación de las 740 comunidades y 19 pueblos indígenas. El proceso contó con el acompañamiento de instituciones del Estado y organismos internacionales como la FAO y el Fondo para el Desarrollo de Pueblos Indígenas de América Latina y el Caribe (Filac).
Hipólito Acevei, representante de las comunidades de Alto Paraguay, indicó que tras 6 años de trabajo se ha elaborado el documento con la participación plena de los pueblos.
Instó a su promulgación por el Ejecutivo sin modificaciones en el contenido del documento ya que el mismo contempla “un resultado sagrado desde la visión de nuestros antepasados, nuestros jóvenes y niños”.
Para el plan se han trabajado en tres líneas de acción: cómo vivíamos, cómo estamos viviendo ahora y cómo queremos vivir en el corto plazo, añadió Acevei.