Asunción, RCC.- En la semana de 24 al 31 de agosto se celebra el Día de la Guarania, en coincidencia con el natalicio de su creador, desde la Secretaría Nacional de Cultura y otras organizaciones culturales preparan actividades en Asunción y que quieren trasladar a las ciudades del interior.
En ese sentido, Alcibiades González Delvalle, presidente del Ateneo-Guaraní, detalló las actividades programadas para conmemorar tan importante aniversario y por supuesto el natalicio de Flores.
«El 15 de agosto arranca esta conmemoración con la OSCA (Orquesta Sinfónica de la Ciudad de Asunción) en el Teatro Municipal, donde se va a interpretar uno de los poemas sinfónicos más conocidos de Flores que es María de la Paz, un gran espectáculo. El 25 en el Teatro Municipal tenemos otras orquestas como la de la Nacional, la Banda de Policía y otras agrupaciones que se van adhiriendo para estos actos, todos estos espectáculos van a ser gratuitos», detalló González.
Añadió que se esperan actos además en la Costanera de Asunción que lleva el nombre de Flores y en ciudades del interior.
«Queremos hacer en varias ciudades del interior, porque nosotros queremos también que la gente del interior participe en esto que es suyo que es la guarania», explicó González.
Subrayó que buscan el apoyo de toda la ciudadanía para lograr que la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, Ciencia y Tecnología (Unesco, por sus siglas en inglés), declare a la guarania como bien nacional y material universal.
«Están muy bien las gestiones que están llevando a cabo los organismos respectivos más el acompañamiento que la ciudadanía está haciendo a este proyecto. Queremos que tenga el final que se merece», concluyó Delvalle.
Flores nació en Asunción el 27 de agosto de 1904, en un barrio de clase humilde de La Chacarita, llamado Punta Carapá. Sus padres fueron María Magdalena Flores de profesión lavandera, y el guitarrista Juan Volta Cornaglia. Aún niño trabajó como recogedor de cartón y lustrabotas para ayudar a su madre en las necesidades hogareñas.
Él mismo contó que su historia musical empezó robando un pedazo de pan de un negocio de las cercanías de la parroquia de San Roque, eso determinó que José fuera a una comisaría y de allí, como «castigo», en carácter de aprendiz en la Banda de Música de la Policía de la Capital.