Con el apoyo de funcionarios del Ministerio de Justicia, adolescentes del Servicio Nacional de Atención al Adolescente Infractor (SENAAI) desarrollaron una huerta que se ha convertido en un espacio educativo y productivo. En esta iniciativa, liderada por el director del centro educativo, Wilfrido Ortega, los jóvenes aprendieron técnicas de cultivo que no solo enriquecen su alimentación, sino también su desarrollo personal y social.
Wilfrido Ortega, técnico agropecuario, asumió el rol de instructor, compartiendo sus conocimientos en agricultura con los adolescentes. Las clases prácticas permitieron a los participantes adquirir habilidades en el manejo de cultivos como zanahoria, remolacha, poroto y orégano. Este proyecto, que comenzó de manera incipiente con la plantación de lechuga y cebollita de verdeo, ha crecido significativamente.
El esfuerzo conjunto entre adolescentes y funcionarios no solo ha permitido cosechas para el consumo, sino también ha inspirado a los jóvenes a perfeccionar sus técnicas con la posibilidad de encontrar una salida laboral en el futuro.
Este tipo de iniciativas resalta el compromiso del SENAAI de fomentar oportunidades educativas y laborales para los adolescentes, fortaleciendo sus habilidades y reintegrándolos positivamente a la sociedad.