1.000 estudiantes viven en internados y escuelas agrícolas en Boquerón

1.000 estudiantes viven en internados y escuelas agrícolas en Boquerón

Niños de la Residencia Educativa de Villa Choferes del Chaco. Foto: RCC

Muchos niños en el departamento de Boquerón no viven con sus padres, pero no por problemas de maltrato o abandono, sino por cuestiones educativas. Para ser más concretos un aproximado de más de 1000 niños, niñas y adolescentes abandonan sus hogares durante el año lectivo para mudarse en residencias escolares o escuelas agrícolas.

Desde el 2012 la DIPROE (Dirección General de Protección Especial a la Niñez) viene trabajando de cerca con chicos que son separados de sus núcleos familiares, por cuestiones de maltrato u abandono, en el que fiscaliza, verifica e implementa programas de acogimiento familiar.

En el departamento de Boquerón la DIPROE posee un eje de trabajo distinto, en conjunto con la Secretaria Nacional de la Niñez y Adolescencia (SNNA), el Ministerio de Educación y Ciencia (MEC) y la Gobernación de Boquerón se encargan de controlar y asistir a las más de 20 residencias educativas y escuelas agrícolas activas del departamento.

La Dra. Dominique Mateus, Directora General de Protección Especial de la Niñez, de la SNNA manifestó que realizaron un recorrido por las distintas residencias para verificar la situación actual de las mismas, menciona que la mayoría de ellas cuentan con la infraestructura, servicio y asistencia adecuadas para mantener a los niños.

El día a día

Los chicos reciben el desayuno, la media mañana, el almuerzo, la merienda, la cena, realizan las tareas de la casa como limpiar pisos, baños, cubiertos, patio, aprenden sobre horticultura, modales, además de realizar las tareas educativas pendientes.

Vínculo con los familiares

En muchos de los casos, estos chicos recurren a las residencias por cuestiones educativas, ya sea porque viven en estancias o simplemente no cuentan con alguien que les cuide mientras los padres trabajan, entonces pasan los días de escuela en la residencia y los fines de semana vuelven a sus hogares o reciben las visitas de los padres cada 15 días.

“Lo ideal es que los niños no pierdan ese vínculo de contacto y pertenencia con sus núcleos familiares que finalmente es el objetivo que busca la política de protección a nivel nacional” explicó la Dra. Dominique Mateus durante el acto protocolar llevado acabo en la Gobernación.

Infraestructura

La mayoría de las residencias tienen una infraestructura dividida en pabellones, ya sean salón general, dormitorio de niñas y dormitorio de niños. Cuentan con un comedor general, una cocina, baños para ambos sexos, duchas con divisorias y todas las comodidades necesarias.

Los encargados

La Directora General de Protección Especial a la Niñez mencionó que lo positivo que rescatan de la visita es que notaron la excelente tarea que cumplen los distinto encargados o tutores en las residencias “la entrega que ellos realizan, los mismos niños les llaman tíos, otros papá o mamá inclusive y es algo muy positivo a destacar” finalizó.

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