América Latina cuenta con altos niveles de corrupción, ante estos hechos se ve reflejada la ausencia de medidas para combatirla, puesto que favorecen a las redes criminales y agudizan la violencia en una región con fuertes tasas de homicidio, advirtió este martes Transparencia Internacional (TI).
La organización expuso nuevamente a Paraguay en una posición de alto nivel de corrupción en el 2022, catalogándolo como el segundo país más corrupto de América del Sur y que apenas logró una puntuación de 28. El primer puesto lo ocupa Venezuela, país que alcanzó en esta ocasión 14 puntos.
Desde 1995, el Índice de Percepción de la Corrupción de TI clasifica anualmente a 180 países y territorios en una escala de cero (muy corruptos) a cien (muy limpios) usando datos de fuentes como el Banco Mundial (BM) o empresas privadas de consultoría.
El informe revela datos globales de un estancamiento ante la lucha contra la corrupción y ponen de manifiesto la relación que existe entre este flagelo y la violencia. «La corrupción y el conflicto se retroalimentan y amenazan la paz duradera«, destaca el informe. Esta problemática es visible especialmente en América Latina.
Los países con puntuaciones más bajas registran una alta criminalidad o sufren conflictos sociales y suelen tener estallidos de violencia.
Por otra parte, la ONG señaló que ninguna nación del continente registró mejoras significativas en contra de este tipo de delitos.
Los países americanos percibidos como menos corruptos en 2022 fueron Canadá (74), Uruguay (74) y Estados Unidos (69), mientras que, en el extremo opuesto de la escala, se situaron Venezuela (14), Haití (17) y Nicaragua (19).