“Me ha encantado escuchar al Presidente Jimmy Morales acerca del gran apoyo que Israel goza en América Latina por parte de nuestros amigos evangélicos. He oído hablar de la alianza. Quiero agradecerle por su oferta de ayuda, tengo la intención de aceptarla, y ponerme en contacto con usted, deseo extender y desarrollar profundamente las relaciones entre Israel y la comunidad evangélica en toda América Latina, así que espero conocerlo y recibirlo en Israel, gracias, Dios lo bendiga” estas palabras fueron dirigidas al Presidente de la Alianza Evangélica Latina, Juan Cruz Cellammare.
El fin de semana pasado se realizó el Congreso Latinoamericano de Líderes Cristianos, auspiciado por Keren Kayemet LeIsrael y la organización Sionista Mundial. En el marco de la actividad donde se profundizó la estrecha amistad entre el Estado de Israel y el pueblo judío con las diversas comunidades cristianas, a su vez se introdujeron en la historia Judía, en la ocasión participaron varios miembros de la Alianza Evangélica Latina – AEL, entre ellos, el vicepresidente Louder Garabedian, el presidente de la Alianza Evangélica de Brasil, Olgálvaro Basto Junior, el presidente del Concilio Nacional Evangélico del Perú (CONEP), el Pr. Eduardo Concha y el Pr. Eduardo Gómez, Canciller de la AEL.
En el marco del Congreso Latinoamericano se dieron cita a un conversatorio sobre Diplomacia Religiosa, donde fue participe el Pastor Eduardo Gómez, Canciller de la Alianza Evangélica Latina AEL y el Ex Presidente número 50 de la República de Guatemala, Jimmy Morales.
Los líderes trataron temas relativos a las normas de excelencia del sector Interreligioso, además puntos estratégicos y éticos para la toma de decisiones en el campo de la diplomacia, la política, y su impacto en las nuevas generaciones.
El 29 de noviembre, la Asamblea General de las Naciones Unidas se reunió en Nueva York en el año 1947, donde aprobó con una mayoría de dos tercios de los votos la Resolución 181, donde se establece el Plan de Partición de Palestina el cual proponía la terminación del Mandato Británico y la división de la Palestina occidental en dos estados soberanos, uno judío y otro árabe, quedando el área de Jerusalén y Belén bajo un régimen de jurisdicción internacional.