Si bien, el Día Internacional de la Mujer, se celebra cada 8 de marzo y está reconocido por las Naciones Unidas. En este día se conmemora la lucha de la mujer por su participación, en pie de igualdad con el hombre, en la sociedad y en su desarrollo integro como persona.
Pues actualmente, estas celebraciones se han manchado por ciertos grupos que corrompen la verdadera causa de celebración, un hecho bastante penoso fue lo que ha ocurrido en el país de México, donde en primera instancia las mujeres manifestantes llegaron a Palacio de Gobierno donde quebraron ventanas y realizaron pintas, manera en que aparentemente realizaban una protesta en contra de la violencia y homicidios contra las mujeres.
Posteriormente se recorrieron la calle Libertad de dicha ciudad, en donde al arribar a las instalaciones del Congreso del Estado, con martillo rompieron los vidrios y entraron a la planta baja, donde realizaron pintas en aerosol en la zona conocida como planta baja. Luego salieron del recinto y se trasladaron a la Presidencia Municipal, donde quebraron algunas ventanas y llevaron a cabo pintas.
La lucha de las mujeres por su participación en la sociedad y su desarrollo íntegro como persona, es una causa justa pero que generalmente se ve opacada y manchada a raíz de la introducción de otros intereses de por medio como la ideología de género, promoción del aborto, comunidad LGBT y otros antivalores.
Cuando los reclamos se enfocan en la violencia contra la mujer, la discriminación laboral, las desigualdades salariales, o el acoso entre otros temas que conciernen a la lucha femenina y donde el gobierno debe tomar las medidas necesarias. Son correctas.
Sin embargo, la preocupación principal radica en la introducción de otras agendas que buscan promover antivalores que nada tienen que ver con la causa original del movimiento. Lastimosamente este tipo de injerencias de temas como el aborto legal y la promoción de la ideología de género LGBT terminan nublando un movimiento y una causa justa.
¿Queremos esto en Paraguay?
