La Corte Suprema anuló este viernes 24 de junio el fallo del caso Roe vs. Wade, que hace 49 años abrió las puertas al aborto legal en Estados Unidos.
Si bien este fallo no convierte el aborto en ilegal en todo Estados Unidos, al menos en una docena de estados esta práctica será considerada un delito y entrarán en vigor leyes que protegen a la madre y al bebé en el vientre materno.
Seís jueces se mostraron a favor de anular Roe vs. Wade, contra tres que se opusieron.
A favor se mostraron los jueces Samuel Alito, Neil Gorsuch, Brett Kavanaugh, Amy Coney Barrett, Clarence Thomas y el presidente de la Corte Suprema, John Roberts. En contra se mostraron Stephen Gerald Breyer, Sonia Sotomayor y Elena Kagan.
La decisión de la Corte Suprema anula también el fallo del caso Casey vs. Planned Parenthood de 1992, una decisión que en su momento reafirmó la sentencia de Roe vs. Wade.
En la opinión mayoritaria de la Corte, escrita por el juez Samuel Alito, se asegura que “sostenemos que Roe y Casey deben ser anulados”, pues la Constitución de Estados Unidos “no hace referencia al aborto”.
“Tal derecho no está protegido implícitamente por ninguna disposición constitucional, incluida aquella en la que ahora se basan principalmente los defensores de Roe y Casey: la Cláusula del debido proceso de la Decimocuarta Enmienda”, se añade.
“Esa disposición se ha sostenido para garantizar algunos derechos que no están mencionados en la Constitución, pero cualquier derecho de ese tipo debe estar ‘profundamente arraigado en la historia y tradición de esta Nación’ e ‘implícito en el concepto de libertad ordenada’”, expresa la Corte Suprema.
“Es hora de hacer caso a la Constitución y devolver el tema del aborto a los representantes electos del pueblo”, añadieron los jueces, por lo cual la legislación en materia de aborto deberá ser definida en cada estado.
Dejá tu comentario