Dijo que uno puede tener la “mejor intención de todas”, pero si comunica mal, tarde o temprano habrá problemas, “porque la mala comunicación es abortiva, pues es capaz de destruir personas, propósitos, trabajos y oportunidades.
Añadió que la humanidad que Dios puso en nosotros “tiene muchísimo que ver” con la comunicación. “Jesucristo era un gran comunicador, porque todo lo que decía era coherente, lógico, instructivo, simple, claro, aunque nunca escribió una sola palabra, probablemente”, comentó.
Acotó que todo lo que sabemos de Jesús lo sabemos por la gente que estuvo cerca de él, que lo escuchó hablar y que pudo transmitir ese mensaje, porque evidentemente ese mensaje llegó bien primeramente a ellos.
En ese sentido, afirmó que el Sermón del Monte, “una riqueza intelectual extraordinaria”, es un discurso de 17 minutos, en el cual está concentrada la sabiduría de Dios, el diseño y el futuro del ser humano. “Y eso solo lo puede hacer un gran comunicador”.
En ese contexto, recordó que nosotros fuimos creados a imagen y semejanza de Dios, lo que quiere decir que también tenemos el potencial de hacernos entender de una manera “muy eficiente”, de que las ideas que volquemos en el mundo trasciendan.
COMUNICACIÓN ESTRATEGICA
Más adelante manifestó que todo buen plan siempre tiene una “estrategia de comunicación”, sin importar la disciplina a la cual uno está involucrado. “No importa si soy periodista, maestro, ingeniero civil o aeronáutico, siempre hay una estrategia de comunicación que necesito tener en manos”, alertó.
Añadió que la comunicación se puede planear “hasta el último detalle”, y eso se llama comunicación estratégica, de la cual deberían echar manos los gobiernos, los candidatos políticos, las empresas y las familias.
¿ESTAMOS PREPARADOS PARA NO SER MANIPULADOS?
Griffith alertó, “con mucho pesar”, que hay una gran amenaza en ciernes para la comunicación, “que no es poca cosa”, y que está en la educación, afectando las leyes, el trabajo, el desarrollo, y que va a cambiar el mundo en los próximos años, “y tenemos que hablar de eso”.
En ese sentido, se preguntó: “¿Están nuestros alumnos, discípulos, funcionarios y ciudadanos preparados para no ser manipulados? ¿Cómo saber que nos están manipulando? ¿Cómo reconocer las oportunidades que tenemos para cambiar las cosas comunicando bien?
LA VERDAD “SE CREA CON PALABRAS”
En ese mismo orden, expresó que hay gente que ya se ha dado cuenta de que las ideas y las creencias forman las estructuras como si la creación de la realidad dependiera de un discurso.
Al respecto citó a Claude Lévi-Strauss, un famoso filósofo, exponente de una corriente filosófica denominada “Estructuralismo”, que dice que hay discursos e ideas que van entramándose en la sociedad y van creando una realidad, y que eso es la verdad. “Ahora, esa realidad puede ser verdadera o falsa. Puede ser correcta como incorrecta, pero se crea con palabras”, alertó.
Al referirse a la naturaleza caída de hombre, se preguntó: ¿Cómo ocurrió el pecado original? ¿No fue una manipulación? ¿No se utilizaron palabras para hacer caer a toda la humanidad? “Entonces, los estructuralistas sí que tienen razón, solamente que muchos de estos filósofos son realmente perversos y están cambiando el mundo con sus ideas, pero para mal, no para bien, lamento decirlo”.
PODER PARA CONSTRUIR, DESTRUIR O “DECONSTRUIR”
El viceministro admitió la idea de que la realidad puede ser construida con palabras; sin embargo, advirtió que con las capacidades de la comunicación uno puede construir o destruir, “o, como dicen los posmodernos, “deconstruir”.
Al dar un ejemplo sobre el punto, dijo que uno puede destruir con sus palabras a una persona que cree grandes cosas de sí misma y que tenido grandes logros en su vida, atacando su identidad, su futuro, le carga de pesimismo, de nihilismo, y va a lograr alterar su realidad futura y le va a estar deconstruyendo de sus propias características.
CAPACIDAD PARA MANIPULAR Y SER MANIPULADO
Griffith alertó que hay que tener mucho cuidado en no caer en la manipulación, teniendo en cuenta la naturaleza humana, que es manipular y ser manipulado. “Es una extraña mezcla de víctima y victimario, de lobo y de cordero”, expresó.
Sobre el punto, agregó que hay una “masa manipulable” y hay “unos cuantos perversos” con ganas de manipular, y lo hacen a través de las redes sociales, la política, etc.
Añadió que hay que entender que la naturaleza humana es vulnerable en términos de creencia, porque estamos diseñados para creer y, la verdad, a veces creer “cualquier cosa”.
“Nuestro diseño es tener fe, pero en el mensaje correcto, porque también somos capaces de creer los mensajes incorrectos; nuestra naturaleza no es cambiar de opinión, sino creer”, acotó.
Manifestó que nuestra naturaleza no es desconfiar, sino que aprendemos a ser desconfiados. “Por eso es que cuando somos niños creemos ciegamente a nuestros padres, razón por la cual es bueno tener buenos padres y buena la familia”, remarcó.
LA COMUNICACIÓN ES UTIL, NECESARIA, IMPRESDIBLE…
El alto funcionario del Gobierno afirmó igualmente que la comunicación es útil, necesaria, imprescindible, y que las palabras y las ideas son como el cincel y el martillo, con lo cual se va construyendo una realidad.
Manifestó que la comunicación es útil para conseguir “casi todos los objetivos”; para afectar destinos propios y ajenos. “Si un niño me cree que él es un campeón, la buena noticia es que ya es un campeón. Si cree lo contrario, la mala noticia es que es lo contrario”, destacó.
Dijo asimismo que la buena comunicación también es útil para construir confianza, para estructurar o desestructurar el futuro, para ejercer influencia, para conectar personas y para construir identidad.
COMUNICACIÓN ASERTIVA
Finalmente, el viceministro habló de las características de una “comunicación asertiva”, diciendo lo cuanto sigue.
- La comunicación asertiva comunica todo, sin ofender. La gente no se siente agredida por mi mensaje, por mis ideas, mis argumentos, no se siente humillada, disminuida. Por el contrario, la persona se sienta considerada, incluida, respetada, pero a la vez recibe un mensaje y que entienda que es un mensaje firme, pero que no ofende, no es violenta.
- La comunicación asertiva, sin embargo, no es un exceso de empatía, que nos puede costar el silencio. Hay que tener empatía, pero no al costo de la verdad.
- Preserva al individuo, pero también el mensaje. Es ser firme, pero a la vez educado y muy respetuoso.
- La recompensa son relaciones sanas, porque no están fundadas sobre abusos ni sobre silencios, sino sobre cuentas claras.
- Hay relaciones fructíferas, basadas en la verdad.
- Se obtienen individuos asertivos con de caracteres resistentes. Individuos con libertad de expresión.
- Se consigue cooperación, paz, crecimiento, etc. Sin la asertividad se limita la autonomía de la gente. Se rompen las relaciones. Hay desacuerdos graves que pueden llevar a la soledad.
