Si bien la forma de tomar el tereré varía de persona a persona, lo cierto es que, cuando se consume esta bebida tradicional analcohólica del Paraguay, es el momento ameno del día, puesto que, cuando se toma con otras personas, siempre hay un intercambio de anécdotas y opiniones que fortalece los vínculos.
El tereré es una razón para disfrutar del instante, aun tomando solos, se disfruta de la compañía de uno mismo; dependiendo de la ocasión, resulta una herramienta de inspiración para seguir trabajando, o de relajamiento, si se está descansando.
Algunas personas lo consumen con abundante hielo y con pohã ro´ysã o remedio refrescante. Cada hierba provee beneficios para la salud relacionados a la sabiduría popular, que se ha transmitido de generación en generación y deriva, además, de distintos rincones del país. Entre los más conocidos se encuentran el tarope, kapi´i kati, perdudilla, menta´i, ajenjo, jaguarete ka´a, para para´i agrial y otros.
Lo que se debe tener en cuenta a la hora de preparar el tereré y utilizar el pohã ñana es que éstos, generalmente, son recolectados del suelo o de árboles, entonces deben ser correctamente lavados para evitar que sean vehículos de sustancias que puedan enfermar.
Por lo general, el tereré se puede preparar en una jarra, ya sea de aluminio, de plata, de plástico o en termo, donde se mezclan el agua helada con el pohã ñana (si así se prefiere), que previamente fue triturado en un mortero (angu´a). Luego se sirve en una guampa cargada con yerba mate (Ilex paraguariensis) y se succiona una vez agregado el agua con una bombilla introducida en la yerba mate.
El tipo de yerba utilizada también puede variar. Hoy día existe una gran variedad de producción de yerba para el tereré, variando desde las más sencillas, llamadas compuestas sin hierbas medicinales, con hierbas medicinales, sin palo, con palo, algunos inclusive con publicidad medicinal, energizante, calmante o adelgazante.
Parte del ritual o costumbre en el consumo de esta bebida, es que el primer sorbo sea ofrecido al Paí Zumé o Santo Tomás, considerado el Santo Patrono de la yerba mate. Para ello, se ceba el agua sobre la yerba sin humedecer, con el objetivo que la yerba seca absorba casi todo el líquido, humedeciéndose.
Otra costumbre es realizar el tereré “rupa”, que consiste en comer un alimento salado durante la media mañana antes de consumir el tereré. Aunque está muy arraigado el consumo de opciones fritas, en lo posible, se debe optar por alimentos saludables para ese momento.
También es bueno recalcar que el consumo del tereré no debe ser considerado para reemplazar la ingesta de agua que se necesita beber para lograr que el organismo pueda realizar el balance, sobre todo en esta época de mucho calor.
El tereré fue declarado como Patrimonio Cultural Paraguayo, mediante la Ley N° 4.261/2011; en el mismo documento que también establece al último sábado de febrero como “El día nacional del Tereré”.














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