La Albirroja, con aspiraciones de avanzar a los cuartos de final, tiene claras las cuentas: una victoria les aseguraría la clasificación, posiblemente como segundos del grupo. Esta opción les permitiría evitar depender de otros resultados y garantizar su continuidad en el torneo.
En caso de un empate, Paraguay también mantiene posibilidades de avanzar, aunque debería esperar que Israel no derrote a Japón. Un triunfo del equipo israelí igualaría en puntos a la Albirroja, pero la superaría en la diferencia de goles, complicando la clasificación directa de la Albirroja.
Aunque existe una remota posibilidad de que Paraguay termine como líder del grupo, las circunstancias son adversas. Para lograrlo, necesitaría una goleada contundente sobre Malí y que Israel derrote a Japón, un escenario complicado debido a la considerable diferencia de nueve goles entre la Albirroja y los asiáticos.