Ambas selecciones llegan con el repechaje prácticamente asegurado, aventajan por seis y siete puntos, respectivamente, a sus perseguidores inmediatos: Venezuela y Bolivia. Pero la mira está más arriba. Paraguay sabe que un triunfo en el Defensores del Chaco y una victoria venezolana sobre Bolivia el viernes en Maturín podrían dejarlo al borde del gran objetivo.
El entrenador Gustavo Alfaro cuenta con plantel completo y dejó en claro la importancia del compromiso: “Este es el partido. Contra Uruguay es el partido”, subrayó el argentino, quien debutó precisamente ante la Celeste en el empate sin goles en septiembre del 2024. Aunque admitió que Venezuela y Bolivia son los verdaderos rivales en la lucha por el repechaje, remarcó que vencer a un rival directo como Uruguay representa una oportunidad única.
Del otro lado, los de Marcelo Bielsa llegan golpeados por la ausencia de tres piezas clave: los mediocampistas Federico Valverde y Rodrigo Bentancur, además del delantero Darwin Núñez. Pese a las bajas, la Celeste mantiene un plantel de jerarquía que buscará una victoria que, acompañado de otra victoria la próxima semana, lo clasifique a su quinto Mundial consecutivo.
La misión de Paraguay, en tanto, no termina el jueves: el próximo martes deberá visitar a Brasil en Sao Paulo y, con al menos un empate, y una victoria uruguaya sobre Venezuela en Montevideo, podría sellar el tan ansiado regreso a una Copa del Mundo, tras 16 años de ausencia.
La probable alineación de Paraguay para enfrentar a Uruguay sería con: Roberto “Gatito” Fernández; Juan Cáceres, Gustavo Gómez, Omar Alderete y Junior Alonso; Andrés Cubas, Matías Galarza y Diego Gómez; Miguel Álmirón, Julio Enciso y Antonio Sanabria.
