«La Guerra de las Malvinas», «La Mano de Dios» y «El Gol del Siglo» en el recital de Maradona

A 34 años del histórico partido por cuartos de final del Mundial México 86, entre Argentina e Inglaterra, en el que el exastro argentino firmó uno de sus mejores partidos con la Albiceleste, recordaron cómo el conflicto bélico de 1982 terminó convirtiéndose en un condimento especial dentro y fuera del campo de juego. Para los argentinos fue una especie de "justicia divina". Hicieron hasta una música referente a ese partido.Mirá la historia.

«La Guerra de las Malvinas», «La Mano de Dios» y «El Gol del Siglo» en el recital de Maradona

Filadelfia, RCC. El 22 de junio de 1986, ante un poco más de 114.000 espectadores en uno de los templos del fútbol mundial, el estadio Azteca, Diego Armando Maradona protagonizó una de las mejores actuaciones individuales que un futbolista pueda firmar. El “10” Albiceleste terminó inmortalizando “La Mano de Dios” y “El Gol del Siglo”.

Ese duelo entre Argentina e Inglaterra, por los cuartos de final del Mundial que se disputó en suelo mexicano, fue mucho más que un simple partido de fútbol. El duelo tuvo un condimento demasiado sentimental por un caso ajeno al deporte rey; la Guerra de las Malvinas, que se llevó muchas vidas en el campo de batalla en 1982.

Por esa razón, la majestuosa actuación de Diego Maradona ante los británicos fue considerada como una especie de venganza divina. Y fue desde esa perspectiva también que los argentinos intentaron justificar el gol con la mano de su capitán. “Lo hice con la cabeza de Maradona, pero con la mano de Dios”, indicó «El Diego» después de apelar a la trampa.

Sin embargo, «El Pelusa» firmó una de las más bonitas obras en la historia de los mundiales solo minutos después. Luego de recibir el balón en la mitad de la cancha, el “10” comenzó a esquivar rivales para luego acostar a Peter Shilton, golero inglés e inmortalizar el considerado “Gol del Siglo”.

¿Qué tiene que ver la Guerra de las Malvinas con un partido de fútbol? Pese a que se intentó separar la cuestión, fue inevitable trasladar la rivalidad del campo de batalla a un campo de fútbol y especialmente porque algunos jugadores argentinos habían vivido de cerca el conflicto bélico entre los dos países; la famosa “Clase 62”.

La gran mayoría de los combatientes habían nacido entre 1961 y 1962 y la Selección Argentina contaba con 5 jugadores pertenecientes a la “Clase 62”. Jorge Burruchaga y Carlos Tapia hicieron el Servicio Militar pero no fueron enviados a combatir, mientras que Néstor Clausen ya jugaba en la Primera División de Argentinos Juniors y la institución hizo su parte para “guardar” al futbolista. Mientras tanto, Sergio Batista y Héctor Enrique no hicieron el Servicio Militar debido a que no fueron seleccionados en el sorteo.

“¿Sabés la cantidad de veces que pensé que podía viajar a las Malvinas? Después de la guerra, seguí yendo tres semanas al regimiento, hasta que nos dieron la baja, y en ese tiempo nos preguntábamos con los otros conscriptos: «¿Te acordás de fulano?, murió». «¿Y te acordás del otro? También murió”, comentó en una ocasión Jorge Burruchaga.

El día del partido, la tensión se vivió a flor de piel dentro y fuera del estadio con los enfrentamientos entre los Hooligans y los Barras Bravas; grupos vandálicos caracterizados por causar destrozos disfrazados de hinchas de fútbol. Los disturbios más graves sucedieron luego de la clasificación argentina, en las calles de la ciudad, que dejaron 60 heridos y 68 arrestados.

En la fecha se recuerda 34 años de ese recordado partido y muchos jóvenes fanáticos criticaron con dureza a los medios de comunicación que se jactaron por «La Mano de Dios», por considerar un mal ejemplo para la sociedad. No obstante, los que saben en qué contexto ocurrió aseguran que la picardía de Maradona maravilló a todos.

“Y que Dios me perdone lo que voy a decir, contra Inglaterra hoy, aún así, con un gol con la mano”, indicó el relator deportivo, Víctor Hugo Morales, en medio de su grito sagrado. Y redobló la apuesta al final del partido cuando exclamó: “Ha ganado Argentina a Inglaterra…a Inglaterra. Lo voy a decir una sola vez y Dios me perdone porque no es un golpe bajo, por todos los pibes que no pueden gritar esta victoria ¡Argentina 2, Inglaterra 1!”.

Daniel Devita, un rapero y escritor argentino, justamente hizo una música cuya letra da una idea más acabada del contexto en que se vivió ese épico partido en el estadio Azteca.

“Dale Diego que en tus piernas vas cargando, con la historia de los tuyos su verdad. Dale Diego que del cielo están mirando, como tus pies empiezan a despegar, de ese suelo que no puede contenerte de aquellos que pisan fuerte y a destiempo no te llegan a alcanzar. Están viendo que avanzas a tu destino y ese orgullo argentino que tu firma va a llevar”, reza una parte de la canción.

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