El estadio Jornalista Mário Filho, más conocido como Maracaná, actualmente se está realizando mejoras en el césped, por lo que el recinto se mantiene cerrado y obliga que este martes el Flu tenga que recibir a Olimpia en el Nilton Santos, escenario del Botafogo. Esta situación causó molestia a los simpatizantes del Fluminense.
“El próximo partido válido para la Libertadores se jugará en el Estadio Nilton Santos. La decisión se tomó tras un pedido de Vasco da Gama, quien alegó motivos de seguridad para pedir el cambio de lugar previsto inicialmente para el partido”, menciona el inicio del comunicado. Aunque el contrato preveía que los dos partidos se realizaran en São Januário, Fluminense decidió cambiar el lugar del partido en nombre de la buena relación entre los dos clubes en Río, sin cobrar multa, agrega.