En un partido cerrado, sin ritmo y sin apenas ocasiones, Suecia supo hacer valer su condición de local y perseguir con paciencia esa ocasión que encontrase a la República Checa desprevenida. Tuvo que esperar para ello a la segunda parte de la prórroga. Antes de eso, el partido se movió en la más absoluta intrascendencia. De hecho fue la República Checa quien gozó de las primeras ocasiones reseñables del encuentro.
La solución del partido para Suecia se encontraba en el banco de suplentes. Robin Quaison ingresó en el segundo tiempo y a los 110 minutos del tiempo extra, tuvo una oportunidad de recibir un balón en la frontal del área. Se asoció con el jugador de la Real Sociedad de España, Alexander Isak, que asistió a Quaison para que quedara mano a mano con el arquero Vaclik que aprovechó de gran manera para convertir el 1-0.
Cuando finalizaba el encuentro el entrenador de Suecia, Janne Andersson sacó al asistidor del encuentro para hacer ingresar al central Filip Helander y también hizo debutar al joven talente del Manchester United, Anthony Elanga que entró para aportar velocidad con los contragolpes. En los minutos finales, Suecia no pasó inconvenientes ya que se encontró con una República Checa que tras el gol en contra se entregó. El conjunto sueco se medirá ante Polonia por un lugar al Mundial de Qatar.