En comunicación con RCC Radio, el coordinador de la iniciativa, Juan Chávez Peralta, destacó el clima de tranquilidad y entusiasmo que se vivía desde las primeras horas de la mañana dentro del penal, donde se desarrollaban múltiples actividades destinadas a personas privadas de libertad.
“Estamos pasando una linda mañana, gracias a Dios. Hay un equipo enorme trabajando: preparación de asado, kits para cada interno, peluquería solidaria y cine móvil. Todo forma parte del programa Libre Tras las Rejas”, expresó Chávez Peralta, al señalar que incluso los propios internos colaboran ofreciendo cortes de cabello gratuitos, lo que les permite sentirse parte activa de la jornada.
El coordinador remarcó que uno de los pabellones alberga a cerca de 300 personas, muchas de las cuales no reciben visitas de manera regular. “Ahí es donde enfocamos el servicio. Se percibe mucha gratitud y un ambiente muy tranquilo”, señaló.

Chávez Peralta subrayó además que el alcance de la iniciativa no sería posible sin el trabajo permanente de las iglesias dentro de las cárceles. En ese contexto, cedió la palabra al pastor y capellán Paul Martínez, coordinador de uno de los pabellones del penal.
TRABAJO SILENCIOSO E INVISIBLE, PERO CON RESULTADOS PALPABLES
Martínez explicó que lleva tres años trabajando en la penitenciaría y que actualmente coordina un pabellón en el marco de un convenio con el Ministerio de Justicia, a través del programa Porvenir, con apoyo de Misión Tras Chaco.
“Este apoyo es muy importante para nosotros. El trabajo que realizamos es constante, silencioso, muchas veces invisible, pero los resultados se ven cuando escuchamos testimonios de personas que salen con su vida y su familia restauradas”, afirmó el capellán.
Destacó que la labor penitenciaria es, ante todo, espiritual. “Creemos que la verdadera restauración viene cuando Jesús es el centro. Como dice la Biblia, conocer la verdad hace libre a la persona. Y aunque las estadísticas no siempre reflejen grandes números, para nosotros una vida transformada ya vale todo”, sostuvo.
Finalmente, el pastor Martínez valoró la unidad entre iglesias y organizaciones sociales, y pidió el acompañamiento en oración. “Este no es el trabajo de una sola iglesia, es el trabajo del Cuerpo de Cristo. La oración nos sostiene frente a las dificultades y nos da fuerzas para seguir adelante”, concluyó.