La riada que se tuvo esta semana se debió a las intensas lluvias caídas en la región comprendida entre Entre Ríos (Argentina) y Villamontes (Bolivia), donde incluso se produjeron algunos desbordes.
En territorio paraguayo, la crecida no ocasionó inconvenientes ni tampoco alcanzó los 5,50 metros que es cuando se activa la alerta naranja, aunque sí se observó un buen caudal ingresando al Chaco paraguayo por la embocadura.
Actualmente, en Villamontes, el río está con 1,85 metros de profundidad, pero en bajante, así como en el puente Aruma con 4,25 metros, lo que significa que no se esperan eventos importantes o riesgos de desbordes para la cuenca baja en los próximos días.