Estas jornadas contaron con el acompañamiento de los técnicos del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) y de las empresas encargadas tanto de la fiscalización como de la ejecución de este lote que abarca 64,76 km.
Los principales temas abordados fueron: presentación de los principales componentes del proyecto y socialización del mecanismo de atención a quejas y reclamos. Además, se abrió un espacio a consultas y sugerencias de la comunidad.
Participaron de esta actividad, referentes comunitarios, pobladores y autoridades locales. De esta forma se inició el proceso de comunicación y sinergia con la comunidad, en el área de influencia directa de este emprendimiento vial.
DETALLES DE LA OBRA
La Ruta de la Leche comprende una vía de 188,2 km en el Chaco Central, de los cuales se asfaltarán 136, 23 km. El resto será suelo mejorado con obras básicas.
El Lote 1 abarca Cruce de los Pioneros – Paratodo desde la progresiva 0+00 hasta la progresiva 48+400 incluidos los accesos a Santa Cecilia y Lolita, totalizando 64,76 km. El Consorcio Vías de Occidente es el encargado y está conformado por las empresas Constructora Heisecke S.A. y Vialtec S.A.
El Lote 2 comprende Cruce de los Pioneros –Paratodo desde la progresiva 48+400 incluido el tramo Paratodo – Cruce Douglas a partir de la progresiva 5+100, el acceso Aceval y el tramo Campo Aceval – Cruce Infante Ávalos Sánchez, desde la progresiva 0+00 hasta la progresiva 29+500 sumando así 71,47 km. Allí el Consorcio Chaco Central, integrado por Benito Roggio e Hijos S.A. y LT S.A., es el responsable.
Este tercer y último lote -consistente en obras básicas con suelo mejorado- fue adjudicado a Tecnología del Sur S.A.E. y se divide en dos sectores: el primero es Paratodo – Cruce Douglas desde la progresiva 5+100 y el segundo sector que incluye el tramo Campo Aceval – Cruce Infante Ávalos Sánchez desde la progresiva 29+500.
Con la pavimentación asfáltica y mejoramiento de la Ruta de la Leche– cuyo financiamiento proviene del Banco Interamericano de Desarrollo (BID)- se potenciarán áreas de mucha producción, además se mejorarán accesos a sitios históricos de la guerra del Chaco, lo que favorecerá al turismo.
El aislamiento, la limitada provisión de artículos de primera necesidad, pérdidas en la producción y el desaprovechamiento de la capacidad productiva de la zona en épocas de lluvia, acabarán gracias a este emprendimiento.
Se estima que, durante todo su proceso constructivo, se generarán más de 1.000 empleos directos, dando prioridad a los pobladores locales.