El ingeniero Gian Pier Guzmán, del consorcio Pybra, explicó que la planificación es una actividad de mucha importancia en la gestión y organización del proyecto; y una de sus ventajas es la reducción de la variabilidad, una condición importante en la construcción del puente, considerando su lejanía y condiciones de acceso.
El profesional resaltó que la planificación es una actividad clave en el proyecto, pues establece una secuencia lógica en la ejecución de los trabajos. Por tanto, cuentan con un cronograma de actividades donde se observa el camino crítico de la obra. Esto involucra a todas las áreas de la empresa, ya sea de apoyo y soporte, suministros e ingeniería. De esta manera se logra una visión completa del proyecto para su correcta ejecución.
El camino crítico, o ruta crítica, define el conjunto mínimo de tareas. Unas dependen de la finalización de las otras. Es decir, cualquier retraso que afecte a alguna de las tareas impacta directamente en la fecha de finalización del proyecto, informó la Itaipu.
“Carmelo Peralta (Chaco) tiene accesos limitados y distantes desde Asunción (unos 700 km), que es el mercado principal para los suministros. Entonces, la logística de las compras y adquisiciones se tiene que hacer con mayor anticipación o previsión para poder tener los recursos en el lugar correcto, en el momento correcto, y poder ejecutar el proyecto dentro del plazo establecido”, acotó.
En ese sentido, considerando el camino crítico de la obra, recalcó la importancia del trabajo de planificación en la construcción del Puente de la Bioceánica, donde también se necesitarán materiales especialmente diseñados y que serán traídos del mercado local e incluso del mercado internacional, dependiendo de la etapa del proyecto.
El Puente de la Bioceánica tendrá una extensión de 1.294 metros, divididos en tres tramos: dos constituirán los viaductos de acceso en ambas márgenes del río Paraguay; y uno corresponderá a la parte atirantada, de 632 metros, con un vano central de 350 m.
Itaipu contribuye con el desarrollo sostenible del Paraguay y está comprometida con la integración regional mediante el impulso y financiamiento de nuevas infraestructuras que generen empleo, renta y bienestar social. La construcción del emprendimiento, a cargo del Consorcio Pybra (Tecnoedil S.A., Paulitec y Construtora Cidade), es fiscalizada por el Consorcio Prointec y gerenciada por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC).
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