Cómo una de las autoridades presentes, el presidente de la Asociación y Cooperativa Neuland, Heinz Alfred Bartel, dedicó algunas palabras en medio de la inauguración oficial de la vigésimo séptima edición de la Expo Rodeo Neuland. A continuación, su discurso:
Es para toda la comunidad de Neuland y sus alrededores una gran satisfacción y un privilegio poder recibirles hoy en nuestra casa.
Un lugar de vida que fue elaborado y construido desde hace más de siete décadas paso a paso enfrentando un sinnúmero de adversidades y comenzando de la nada. Me corrijo, no de la nada, lo que estaba a disposición era el suelo chaqueño que había sido conquistado con gran sacrificio por el ejército paraguayo en la gloriosa gesta del Chaco y hubo un estado y gobierno del Paraguay quien abrió las puertas a inmigrantes de diferentes países para adquirir estas tierras y realizar la segunda conquista del territorio que significaba hacerlo productivo y favorecer de esta manera, aunque sea en forma indirecta, a todo el pueblo paraguayo.
Lo que hoy se expone y se muestra en esta feria es el fruto del trabajo y la perseverancia de por lo menos tres generaciones, apostando al Paraguay que es nuestra Patria y demostrando que a pesar de muchas circunstancias adversas en el Chaco si se puede.
Cuando esta sociedad de inmigrantes se fundó, nuestros únicos vecinos fueron los pueblos originarios de los Enhlet y más tarde también los Nivaclé y la convivencia fue pacífica. Hoy en Neuland y sus alrededores viven conciudadanos cuyos orígenes son prácticamente de todos los departamentos del país. Para citar un ejemplo: La Cooperativa y Asociación Neuland ofrecen hoy 1.590 puestos de trabajo y de los cuales apenas un 18% son ocupados por hijos o descendientes de inmigrantes.
Disculpen que me detengo brevemente en este tema, pero les comparto mi profunda preocupación cuando en los últimos días escuchamos llamados e instigaciones a la violencia, al vandalismo, al despojo de tierras, a la lucha de clases, la difamación del inmigrante y al no respeto de las instituciones y al orden democrático del país.
La construcción de la paz social es un trabajo diario y en esa labor cada uno tiene que tomar el lugar que le quepa.
El hombre de campo, el comerciante, el funcionario, el docente, el comunicador y los líderes. Las diferencias entre nosotros sean de índole ideológico, sociocultural o políticas debemos resolverlas en el marco del respeto y del dialogo.
Nuestro país es llamado a ser grande por sus recursos, por su gente, por su estabilidad económica, por su situación geopolítica y porque dio muestras de su soberanía. No pongamos en riesgo nuestras instituciones y la convivencia democrática.
Hoy estamos más que convencidos que el Chaco que hace aproximadamente al 60% del territorio nacional y que demográficamente aún sigue prácticamente despoblado es el gran potencial del Paraguay que se viene y que el desarrollo estratégico de esta región cambiará la vida de todos los paraguayos.
En el Chaco hoy reina el optimismo, y para que esto suceda, necesitamos solo una cosa: la lluvia. El campo crece y produce, los productores tienen la esperanza de poder por lo menos parcialmente saldar sus pasivos acumulados durante los tres años de sequía. El consumo en todos los niveles aumenta. Pero también reina el optimismo porque el gobierno se animó a apostar como nunca al desarrollo de este territorio. Reiteramos una vez más, Señor Presidente, nuestra valoración y nuestro reconocimiento por las inversiones realizadas sobre todo en las importantes obras viales y en la conectividad a través de los dos puentes sobre el Río Paraguay en ejecución. El mismo agradecimiento repetimos también a los representantes del Congreso Nacional que, con la aprobación de los financiamientos, hicieron posible estos proyectos.
Sin duda alguna el futuro mediato certificará de cuan acertada era esta estrategia y de cuanto rédito económico y estratégico se logrará para nuestro país.
Otro hecho de gran significancia para el despegue definitivo en el desarrollo del Chaco es la duplicación y ampliación de la transmisión de energía eléctrica para esta región cuya provisión por cierto llega en este año a sus límites. El martes pasado este proyecto fue firmado por la Presidencia y llevado al Congreso para su consideración. Como chaqueños apelamos ahora a los representantes del Senado y la Cámara de Diputados para que aceleren el análisis, el tratamiento y la aprobación de esta tan importante obra para el presente y futuro del Chaco Paraguayo. Conscientes de que los créditos del Estado deben ser bien administrados pedimos con todo el respeto en priorizar la necesidad del 60% del territorio nacional. Esto también es ejercer soberanía.
No quiero terminar mis palabras sin haber expresado nuestra más sincera gratitud al Ministro Bertoni por defender el sistema productivo del Paraguay sea esto en la cumbre climática en Egipto o recientemente en Washington donde claramente se dejó expuesto que el Paraguay no solamente es un país carbono neutro sino también positivo en la captación de carbono. Para esto se necesita coraje, sobre todo en un mundo donde el cambio climático se ha vuelto una ideología.
No sería un discurso del sector productivo si no contiene por lo menos un pedido o reclamo. También hoy tenemos uno y es el la de la seguridad. Nos referimos a la seguridad en las rutas donde los cortes de rutas se han instalado en el calendario semanal con el consecuente e importante perjuicio en el traslado de las personas y de la producción. Y sobre todo la seguridad en el campo donde los delitos, las invasiones y los abigeatos están en constante aumento. Solicitamos mejor presencia de los órganos de seguridad y según necesidad un mayor presupuesto del Estado para la Policía Nacional, las Fiscalías y los Juzgados. Sabiendo que el mejor combate es la prevención.
Quiero cerrar con un especial agradecimiento por honrarnos todos con su presencia, Señor Presidente y representantes de los tres Poderes del Estado. El chaqueño sabe interpretar y valorar este gesto. El Chaco es una experiencia que merece ser vivida y Neuland es su casa. Disfrutemos esta hermosa fiesta del pueblo y de la familia y hagamos grande al Paraguay.
¡Muchas gracias!