Mujeres indígenas se declaran defensoras de la identidad y de la vida

Mujeres de 15 pueblos indígenas que habitan el Paraguay, reunidas los días 3, 4 y 5 de diciembre durante el Segundo Encuentro Nacional de Mujeres Indígenas de Paraguay, reafirmaron los símbolos que identifican a sus comunidades, analizaron en conjunto las dificultades y necesidades que afrontan en sus territorios, así como también las responsabilidades y nivel de respuestas de las instituciones del Estado a sus reclamos de atención y cumplimiento de sus derechos.

Filadelfia, RCC.- Como conclusión del Segundo Encuentro, Mujeres Indígenas del Paraguay emitieron una declaración en donde se proclamaron visibles defensoras de la identidad y de la vida, además denunciaron las necesidades que atraviesan y la poca respuesta que reciben.

«Denunciamos la persistencia de la extrema pobreza en varias de nuestras comunidades que subsisten aisladas, abandonadas y con escasa atención a sus necesidades básicas por parte del Estado», mencionaron.

Denunciaron el lento proceso para resolver los problemas de la propiedad de la tierra (recuperación, demarcación, titulación y defensa), agravados por actuales despojos territoriales en detrimento nuestro y a favor de grandes productores (sojeros y ganaderos) nacionales y extranjeros, provocaron el desplazamiento de las familias hacia las zonas urbanas y los convierten en mendigos.

Además agregaron el grave problema de falta de acceso a un sistema de agua potable, principalmente en el Chaco, así como el envenenamiento de los ríos y arroyos por parte de sectores que solo buscan el lucro, sin pensar en las próximas generaciones destruyen el ambiente.

Resaltaron que el Proyecto de Acueducto en el Chaco «está pensado para los grandes productores y no para resolver el problema de falta de agua de en nuestras comunidades».

La deuda histórica en materia de salud y educación se traduce en enfermedades y muertes evitables, deserción escolar, frustración de los jóvenes ante la imposibilidad de seguir estudiando por falta de colegios accesibles y pensados desde la cosmovisión y necesidades de los pueblos indígenas.

Todavía hay comunidades que no cuentan siquiera con un puesto de salud, con medicamentos, y cuyos habitantes deben andar varios kilómetros en busca de atención médica.

«La falta de cumplimiento de nuestro derecho a la educación. Los maestros indígenas afrontan dificultades hasta para hacer llegar sus carpetas en los concursos para acceder a los cargos. Las becas de estudios universitarios son incompletas y escasas y no contemplan la situación de indígenas», lamentaron.

Por otra parte, también mencionaron el aumento de los casos de abuso sexual, drogadicción y alcoholismo entre los jóvenes debido a la falta de oportunidades educativas y laborales.

«La incontrolable deforestación que afecta a muchas de nuestras comunidades y que se traduce en la destrucción de los pocos bosques que quedan, privandonos de nuestro principal centro natural de abastecimiento, y obligándolos a abandonar nuestros sistemas alimentarios tradicionales y saludables».

Todo esto recae en la progresiva pérdida de la identidad cultural y lengua propia en muchas de las comunidades, por falta de apoyo del Estado a las artesanas, a los ancianos y ancianas, quienes son la memoria viva que transmiten los valores, la lengua, pautas de crianza, usos y costumbres.

Por esto y mucho más exigen:

NOS COMPROMETEMOS:

Salir de la versión móvil