Las obras del Lote 2 de la Ruta PY12, ubicadas en el Bajo Chaco, incorporan diariamente acciones de mitigación ambiental orientadas a minimizar los impactos del proyecto vial y preservar la biodiversidad de la región. Entre las principales tareas del equipo socioambiental se destacan la gestión de residuos, el control del polvo, el monitoreo de fauna silvestre y la realización de charlas socioeducativas tanto en la obra como en comunidades cercanas.
“Nosotros, como equipo socioambiental, lo que hacemos es mitigar los impactos negativos generados por la obra: residuos, efluentes, polvo… Constantemente realizamos charlas socioambientales aquí, en la obra, y también a lo largo del tramo”, explicó la Lic. Eliana Garabano, técnica ambiental del frente vial.
Uno de los ejes centrales del trabajo ambiental es el relevamiento constante de fauna silvestre, con especial énfasis en aves, mamíferos y reptiles. Esta labor permite detectar zonas sensibles, registrar atropellamientos de fauna y aplicar medidas correctivas para reducir estos incidentes.
“En esta obra vial, yo tengo la tarea de relevar fauna —mamíferos, aves y reptiles— y registrar puntos de atropellamiento, para implementar otras medidas de mitigación”, detalló la Lic. Nicole Martínez, bióloga del proyecto. Además, señaló que ante el hallazgo de animales heridos, se activa un protocolo de acompañamiento y rescate especializado.
Entre las especies más comunes registradas en el área se encuentran aves como el tuyuyú cuartelero, taguató, monjita blanca, churrinche, tero y tero real. También se han documentado mamíferos como el aguará guazú —con avistamientos frecuentes—, y reptiles como el curiyú y la yarará, especialmente en la temporada de lluvias.
El enfoque ambiental adoptado en este tramo de la Ruta PY12 demuestra que es posible avanzar en obras de infraestructura respetando el entorno natural, con medidas concretas que buscan la convivencia armónica entre el desarrollo vial y la biodiversidad del Chaco paraguayo.