La exposición pretende visibilizar la gestión del agua a cargo de las mujeres, cuya rutina diaria se halla determinada por la ausencia de este recurso vital. Se busca también acercar las acciones sociales emprendidas a lo largo del proceso de construcción del sistema, para promover el activo protagonismo de las mujeres en todas las etapas, aspecto clave para la sostenibilidad de este tipo de proyectos, según informes.
Las mujeres indígenas del Chaco son las históricas gestoras del agua. Caminan kilómetros bajo el implacable sol de esta región para recolectarla de tajamares y aljibes, generalmente en condiciones no aptas para el consumo humano. Todos los días invierten unas 3 a 5 horas en esta sacrificada tarea. Y el mayor impacto de su carencia también lo asumen ellas: afecta su salud física y mental, por el tiempo y esfuerzo invertido en su búsqueda, además de postergar sus oportunidades de crecimiento y desarrollo.
Refieren que en poco tiempo más, esta realidad quedará atrás cuando las 87 comunidades y aldeas indígenas de los departamentos de Boquerón y Presidente Hayes sean beneficiadas con el servicio, en las localidades de Loma Plata, Mariscal Estigarribia, Filadelfia y Tte. Irala Fernández.
El Programa de Saneamiento y Agua Potable para el Chaco y Ciudades Intermedias de la Región Oriental del Paraguay, etapa 2, está financiado con una donación de 60 millones de dólares de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), a través del Fondo de Cooperación para Agua y Saneamiento (FCAS); un préstamo de 20 millones de dólares del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), y una contrapartida local de 8 millones de dólares.














Dejá tu comentario