La Corporación Agua para el Chaco, reactivada oficialmente en una asamblea celebrada ayer en la sede de la Gobernación de Boquerón, proyecta ambiciosas iniciativas de captación y almacenamiento de agua para mitigar la escasez hídrica que afecta al Chaco paraguayo. Encabezada por el Gobernador Harold Bergen, quien asume como presidente del consejo de administración, la corporación definió sus metas a corto y mediano plazo, priorizando proyectos que permitan hacer frente a futuras sequías en la región.
Entre los planes destacados se encuentran la construcción de nuevos tajamares y la ampliación y limpieza de los existentes, con el fin de optimizar la captación de agua de lluvia. «Queremos crear una infraestructura robusta que asegure el suministro durante todo el año. Nuestra prioridad es que el agua de lluvia, que supera los 500 milímetros anuales, sea captada y almacenada eficientemente en tajamares y pozos,” explicó Bergen.
La corporación también contempla la incorporación de tecnologías avanzadas para la construcción de reservorios y sistemas de canalización, además de fortalecer la infraestructura actual. El objetivo es convertir al Chaco en una región resiliente a la sequía mediante la implementación de soluciones sostenibles que incluyan la perforación de pozos, la creación de sistemas de canalización en comunidades vulnerables y la implementación de reservorios para el almacenamiento seguro del agua.
Próximos pasos y alianzas estratégicas
En el marco de su plan de trabajo, la Corporación Agua para el Chaco se reunirá nuevamente el 5 de diciembre para evaluar el progreso y definir acciones concretas a ejecutar en 2025. Este encuentro será fundamental para marcar la hoja de ruta definitiva, que incluirá alianzas estratégicas con instituciones clave como la Comisión Pilcomayo y la Universidad Nacional de Asunción, recientemente incorporadas a la corporación.
«Estamos organizando la estructura administrativa para recibir fondos y contratar personal técnico, incluyendo un director ejecutivo y un ingeniero hidráulico que supervisarán las obras,» detalló Bergen. Además, el plan contempla la colaboración con cooperativas locales y otras entidades para asegurar que las soluciones hídricas lleguen a las comunidades más necesitadas.
Un llamado a la acción y cooperación comunitaria
La corporación también hace un llamado a los pobladores del Chaco para sumarse a estos esfuerzos, realizando limpiezas de canaletas y reservorios privados. “Si todos participamos, lograremos maximizar el uso del agua de lluvia y garantizar agua potable para todas las familias del Chaco,” enfatizó Bergen.
Con esta nueva reactivación, la Corporación Agua para el Chaco busca consolidarse como un pilar en la gestión de recursos hídricos de la región, con proyectos sostenibles y soluciones definitivas para asegurar el bienestar de las comunidades chaqueñas.