De esta manera, el organismo internacional certifica al Tereré y al Pohã Ñana como PCI, informó el Ministerio de Relaciones Exteriores en su página web. Por Paraguay participó en el encuentro el encargado de Negocios a.i. ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), ministro Hugo Morel Ocampos, quien recibió el certificado de manos de la Jefa de la Unidad de Gestión del Programa Patrimonio Vivo del Sector de la Cultura, doctora Fumiko Ohinata.
En comunicación con Radio Nacional del Paraguay, Víctor Segovia, director de Estudios, Antropología, Arqueología y Paleontología de la Secretaría Nacional de Cultura, indicó que en el 2020 se inscribió la lista representativa, y ahora se certifica.
«La importancia de esta certificación es que perdurará en el tiempo. Ellos (UNESCO) visibilizan y atienden a los portadores». Hay un montón de gente detrás de esta tradición, los yerbateros, los yuyeros y artesanos que hacen las guampas. El principal objetivo es salvaguardar», enfatizó.
Sostuvo que la Unesco acogió muy bien la candidatura por ser considerada un símbolo de paz entre los pueblos, por ello fue inscripta primero y luego certificada.
“Es un símbolo de paz, y la Unesco busca que los pueblos vivan pacíficamente, y el tereré hace que se confraternice, se les ofrece a los extranjeros, porque se vio que solo compartimos entre amigos y con quienes queremos ser amigos, es el símbolo muy pacífico del tereré”, subrayó.
“Llama la atención cómo una tradición pudo enfrentarse tan fuertemente a la presión de la globalización, a veces sorprende que al compartir, nos volvemos como uno solo, con un único elemento del tereré con el pohã ñana que hace que todos los rodeen”, remarcó el funcionario de la SNC.
Esta inscripción constituye un hecho sin precedentes para nuestro país, que hace integrar una pieza de nuestra cultura en la nómina del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, y representa un aporte del Paraguay para los pueblos del mundo.
La práctica del tereré, como bebida tradicional de nuestro país, es transmitida de generación en generación y es la infusión más simbólica de nuestro país, con las características propias que constituyen su preparación y lo hacen un elemento de unión y confraternidad.
Asimismo, el tereré unido al pohã ñana con todos sus saberes y propiedades curativas, cuyos conocimientos fueron perfeccionándose a través del tiempo y son transmitidas en el ámbito familiar, configuran la cultura con la que hoy el Paraguay aporta un legado a la humanidad.
La rica y particular cultura de nuestro país nos impulsa a que próximamente sigamos presentando otras candidaturas a la Unesco, de modo a unir nuestros conocimientos y tradiciones a los de los demás países, para proteger y cuidar la herencia del concierto de las naciones para las futuras generaciones.
En ocasión de la entrega de la certificación, el diplomático, ministro Morel Ocampo, agradeció el apoyo de la Unesco, y resaltó que nuestro país se encuentra estudiando otros elementos representativos de su cultura para su presentación y puesta a consideración del organismo internacional.
De esa manera, el funcionario recalcó el deseo del Paraguay de contribuir al patrimonio universal.